A lo largo de este año, "el Sistema de Dependencia en las islas ha grabado 5.830 nuevas solicitudes de reconocimiento de la dependencia, mientras que en la totalidad del 2022 fueron 4.915 las solicitudes tramitadas", explica la Consejería de Bienestar Social, Igualdad, Juventud, Infancia y Familias en un comunicado. "Al finalizar el 2023, la previsión es que sean 7.500 las nuevas solicitudes que entren en el sistema", expuso la consejera de área, Candelaria Delgado, en intervención parlamentaria.
El primer objetivo ha sido disminuir de las listas de espera de dependencia en Canarias, explicó Delgado. "Para ello hemos puesto en marcha una batería de medidas dirigidas a agilizar la grabación de las solicitudes de reconocimiento de la situación de dependencia tras reforzar el personal e impulsado los reconocimientos de grado de dependencia y del programa de Atención Individual (PIA)", aclaró.
Revisiones de grado
En su intervención, Delgado afirmó el aumento de personal del equipo de valoración permitirá incrementar en 400 expedientes mensuales con respecto a los periodos anteriores. Además, aseguró que se departamento "ya ha reactivado las revisiones de grado de las personas en situación de dependencia". A este respecto, explicó que se han realizado 949 revisiones de grados, “atendiendo así a personas que ya habían sido valoradas hace años y cuya situación había empeorado notablemente, sin que recibieran más ayudas o prestaciones para atender la nueva realidad".
Estas son algunas de las medidas impulsadas por la consejería de Bienestar Social entre las que se encuentran también la publicación del reglamento para la aprobación del decreto, ya en consulta pública, que regulará el procedimiento para el reconocimiento de la situación de dependencia lo que que permitirá "reducir notablemente las listas de espera hasta llegar al plazo de seis meses que marca la ley para el reconocimiento de los derechos a las personas dependientes".
En esta materia, indicó que se establecerá una configuración en una fase del procedimiento para el reconocimiento del grado de dependencia y para la aprobación del Plan Individualizado de Atención (PIA), "una unificación que contribuirá a reducir la burocracia de forma considerable y, en definitiva, que los derechos se hagan efectivos en un breve período de tiempo".