El fundador del Instituto de Enfermedades Tropicales de Canarias, Basilio Valladares, el catedrático emérito de Historia Medieval Eduardo Aznar y el pintor y escultor Gonzalo González han sido elegidos este lunes como Premios Canarias de Investigación, Patrimonio Histórico y Bellas Artes.
Los premios se entregarán, como cada año, en la ceremonia oficial del Día de Canarias, el 30 de mayo. Tras el fallo de los jurados, el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha comunicado personalmente a los tres galardonados la concesión del premio.
Basilio Valladares, que es premio extraordinario de Doctorado en Farmacia y catedrático de parasitología, dirigió el Instituto universitario de enfermedades tropicales y salud pública de Canarias hasta su jubilación, con el fin de investigar las enfermedades tropicales y aquellas patologías que afectan a las poblaciones más pobres.
Enfermedades tropicales
En 2013 promovió la creación de la Fundación Canaria para el control de las enfermedades tropicales para poder recabar los fondos necesarios para el impulso y fortalecimiento de los proyectos que tienen planteados el Instituto universitario de enfermedades tropicales y salud pública de Canarias, especialmente en África, donde ha desarrollado diversos proyectos financiados por la Agencia Española de cooperación internacional para el desarrollo.
El Premio Canarias de Patrimonio Histórico es licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de La Laguna (ULL) y catedrático de Historia Medieval durante más de tres décadas, además de doctor en Historia por la Universidad de Sevilla.
Aznar Vallejo fue uno de los fundadores, y durante muchos años director, del Centro (y luego instituto) de Estudios Medievales y Renacentistas de la ULL y miembro correspondiente de la Real Academia de la Historia. Como docente ha impartido más de veinte asignaturas incorporando en muchas de ellas el conocimiento sobre la Historia de Canarias a las titulaciones oficiales de la universidad.
Poesía
El Premio de Bellas Artes, Gonzalo González (Los Realejos, 1950), reúne una amplia trayectoria en el panorama canario y español, puesto que ha tenido un papel esencial en las transformaciones estéticas de la creación plástica desde los años setenta.
Su obra ha sabido crear un espacio singular en el que convergen diversos planos, su poética definición de la insularidad, el compromiso con el papel del arte en medio del acontecer histórico y la defensa permanente de la expresión más individual en el dominio de la memoria.