Un municipio tan solo es un acuerdo para marcar límites entre ayuntamientos. Tu hasta aquí, yo de aquí para allá. Pero a la historia poco le importa la organización política o administrativa de hoy en día. Mucho antes ya existían pedanías, pagos, asentamientos o entidades poblacionales con carácter diferenciado.
Actualmente Santa Cruz de Tenerife se compone de cinco distritos (Anaga, Centro-Ifara, Salud-La Salle, Ofra-Costa Sur y Suroeste), que a su vez se dividen en 78 barrios. Pero existen otras dos localidades que por su historia se distinguen del resto y a las que la denominación de distrito o barrio les viene pequeño. Es el caso de San Andrés y Taganana, los dos pueblos históricos dentro del ámbito municipal capitalino.
Pueblo histórico, barrio administrativo
Para completar la panorámica del municipio debemos incluir estos dos enclaves fundamentales sin los que no pueden explicarse los orígenes de la capital tinerfeña. Tan pronto terminó la conquista a finales del siglo XV los colonos fundaron San Andrés y Taganana, si bien eran tierras donde los guanches ya se habían asentado, como prueba el patrimonio arqueológico de la zona.
A partir de entonces, San Andrés y Taganana crecieron hasta convertirse en poblaciones con entidad municipal propia separada de Santa Cruz. Por eso, aunque administrativamente tienen un estatus comparable al de otros barrios del distrito de Anaga -como Valleseco, El Suculum o Chamorga-, el Ayuntamiento les restituyó el 30 de octubre de 2013 un título más acorde y volvieron a denominarse pueblos de Taganana y San Andrés aunque carezcan de consistorio independiente.
Del Valle de Salazar al Valle de San Andrés
En el reparto tras la conquista, el hidalgo Lope de Salazar obtuvo del rey la concesión de las tierras del valle y poco después se establecieron las primeras figuras municipales como alcalde o alguacil pero la consolidación como entidad de población diferenciada llegaría a raíz de la construcción en 1706 del castillo o torre de San Andrés, cuyas ruinas son a día de hoy el edificio más emblemático del pueblo, para evitar incursiones de piratas.
Siglos después, al amparo de la Constitución de Cádiz de 1812, la localidad consigue constituirse en municipio independiente tomando el nombre oficial de Valle de San Andrés. Este municipio extinto abarcaba desde el barranco del Bufadero hasta el roque de Antequera separándose del también municipio de Taganana por la cumbre dorsal de Anaga. Finalmente en 1850 fue anexionado a Santa Cruz por no contar con medios para sufragar sus gastos.
Taganana, tierra de cañas de azúcar
El repartimiento de tierras a colonos tras la conquista también supuso el punto de partido de la historia documentada de Taganana. Fundado en 1501, sus primeros habitantes eran colonos procedentes de Fuerteventura y Lanzarote como Gregorio Tabordo o Juan Perdomo. Sus tierras se dedicaron al cultivo de la caña de azúcar, por lo que a la construcción del camino de Las Vueltas como vía de comunicación con La Laguna, capital de la Isla por aquel entonces.
Al igual que San Andrés, a raíz de la Constitución de 1812 Taganana se constituyó como municipio independiente, pero fue integrado en 1850 a la capital por falta de recursos. Sin embargo, en 1868 los tagananeros volvieron retomaron su autonomía como municipio con un ayuntamiento revolucionario que perduraría hasta 1877. Aun así, incluso tras su nueva agregación a Santa Cruz de Tenerife, Taganana contó con alcalde pedáneo hasta 1967.