Un avión de TUI proveniente de la ciudad escocesa de Glasgow ha tenido que declararse en "emergencia por combustible" y desviarse a Tenerife tras dos intentos fallidos de aterrizaje en Gran Canaria.
Así lo ha confirmado la cuenta oficial de los Controladores Aéreos, que ha explicado a Atlántico Hoy que el aeropuerto grancanario presenta la tarde de este jueves una fuerte "cizalladura", esto es, "cambios bruscos en la dirección o intensidad del viento durante el descenso".
El avión de TUI había intentado aterrizar ya en dos ocasiones, realizando en ambas la maniobra conocida como "motor y al aire", que consiste en volver a coger altura cuando la aeronave está ya cerca del suelo. Tras un vuelo de más de 3.000 kilómetros, las reservas de combustible del avión han entrado dentro de la zona de riesgo, por lo que el comandante ha declarado la emergencia por combustible y redireccionado hacia Tenerife.
No entraña peligro
Los Controladores Aéreos explican a Atlántico Hoy que la emergencia por combustible "no quiere decir que el avión se esté cayendo ni nada similar". "Simplemente es que hay una reserva de combustible mínimo con la que todos los aviones deben aterrizar y que es muy amplia. Si en algún momento del vuelo se prevé que pueden aterrizar con menos de esa reserva legal, la tripulación debe declarar emergencia y los controladores aéreos darle prioridad", han señalado.
Según los Controladores, varios vuelos se han desviado a Tenerife Sur por la cizalladura en Gran Canaria, aunque reconocen que la situación en el aeropuerto tinerfeño "no está para tirar cohetes" debido a la situación meteorológica tormentosa, que ha provocado el desvío en las rutas de algunos vuelos que sobrevolaban la isla y la demora por seguridad de algunas operaciones.