Como otras universidades alrededor del mundo, el alumnado de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria se concentra en el Campus de Humanidades del Obelisco en contra del genocidio que está sufriendo Palestina por parte de Israel. Sin embargo, no ven el apoyo por parte de la institución académica, que, según los estudiantes de tercero de Educación Social - quienes han promovido las acciones -, se ha mantenido al margen sin posicionarse al respecto.
La campaña comenzó como un proyecto de clase, pero ante la “conducta pasiva” de la universidad, el alumnado ha dado un paso más allá llevando a cabo una concentración pacífica que se repetirá a lo largo del mes de mayo. No comprenden por qué otras banderas, como la de Ucrania, se han alzado en la universidad, pero se les ha prohibido colocar la de Palestina.
Carteles tirados en la basura y la bandera quitada
La clase de tercero del grado de Educación Social de la Facultad de Ciencias de la Educación colocaron carteles informando sobre la situación que se vive en Palestina con motivo de un trabajo de clase el lunes de esta semana. Sin embargo, al día siguiente se encontraron los carteles “arrancados y tirados en la basura”, cuenta Valeria Rodríguez, estudiante de la misma.
Además, una figura de la universidad, que han preferido mantener en el anonimato, acudió a su aula para solicitar que dejaran las acciones que estaba desarrollando, justificando que “la universidad no se posiciona en una guerra”. El alumnado defiende que no se trata de una guerra, sino de “un genocidio contra el pueblo de Palestina”.
Que la universidad sea un ejemplo
Todo comenzó con unas 40 a 60 personas de la clase a las que se sumaron otros compañeros de la universidad, así como profesorado y personal. Junto a la concentración pacífica que realizan en el campus, también están recogiendo firmas y el próximo lunes 13 de mayo, a las 18:00 horas, se reunirán para otra asamblea por el mismo motivo.
Para el alumnado ya no es “un simple proyecto de clase”, sino que “la universidad necesita un cambio, necesita construirse en un ejemplo para otras universidades”, recoge el manifiesto que leyeron durante la concentración.
Consideran que las acciones y comunicados llevados a cabo por la ULPGC, como el comunicado del Día Internacional de la Solidaridad con el Pueblo Palestino, que fue en conjunto con la Universidad de La Laguna - aspecto que también critican al no hacerse “ni siquiera de manera individual” -, o la Jornada "La Universidad ante el genocidio", les han parecido “insuficientes”.
Piden un comunicado oficial
Los y las estudiantes exponen que las universidades son espacios socioeducativos, donde “la reivindicación de los Derechos Humanos son un objetivo principal”. Por ello, quieren “dejar claro” que no están en contra de la ULPGC, “como institución ni como comunidad”, su solicitud es el posicionamiento de esta. Piden un “no al genocidio, un alto el fuego”.
Exigen que se haga un comunicado oficial por parte de la universidad que “cumpla con los valores que compartimos y queremos visibilizar”. Estos son “la defensa de la equidad y la igualdad de oportunidades, el respeto de las ideas en libertad, la convivencia intercultural y la justicia social”, así como “el fomento de la solidaridad y la cooperación entre los pueblos, con especial atención al desarrollo, la defensa de los valores sociales y la presencia activa en los foros sociales, culturales, etc”.
Postura de la ULPGC
La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, por su parte, defiende que sí ha mostrado su posición en contra del genocidio que sufre Palestina, poniendo de ejemplo los ya mencionados comunicado conjunto con la ULL y las jornadas de 'La Universidad contra el genocidio', además de conciertos benéficos por los niños y niñas de Gaza.
Asimismo, la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), de la que forma parte la ULPGC, publicó a fecha de hoy, 9 de mayo, un escrito en el que las instituciones académicas en conjunto exigen el "cese inmediato y definitivo de las operaciones militares del ejército israelí, así como de cualquier acción de carácter terrorista, y la liberación de las personas secuestradas por Hamas" y que "el Estado de Israel respete el derecho internacional y permita la entrada en Gaza de toda la ayuda humanitaria".
En este comunicado se compromenten también a romper acuerdos de colaboración con universidades y centros de investigación israelíes, intensificar la cooperación con el sistema científico y de educación superior palestino y ampliar los programas de cooperación, voluntariado y atención a la población refugiada, y, por último, velar por que en el ejercicio de libre expresión no se produzcan conductas de antisemitismo o islamofobia.