El juicio celebrado este martes en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas contra el empresario A.J.C.M. ha quedado visto para sentencia. El hombre está acusado de apropiarse de más de 500.000 euros de Sportium Apuestas Canarias. El fiscal Pedro Gimeno solicita para él, la pena de seis años de prisión.
A.J.C.M. se negó a contestar a las preguntas del fiscal, pero sí contestó a las del abogado de la empresa y al letrado que lo defiende, Israel de los Reyes Godoy. La defensa ha basado su argumento en que no existía relación contractual entre el acusado y la empresa. Según expuso Godoy, el contrato que constaba como prueba no demostraba la vinculación entre el denunciado y los denunciantes por tratarse de una mera fotocopia.
"Orfandad probatoria"
Asimismo, alegó que faltaron actuaciones probatorias y eso provocó una “orfandad probatoria”, que debería de ser causa suficiente para absolver al acusado. El abogado defensor criticó que mucha de la documentación mostrada en el juicio como prueba estuviera en inglés y no se hubiera traducido al español. Además, estimó que no se había llevado a cabo una pericial informático que determinara las cantidades presuntamente apropiadas indebidamente.
Por otro lado, el fiscal Pedro Gimeno consideró demostrado que A.J.C.M. tenía experiencia como empresario en el sector de las apuestas ya no sólo en Gran Canaria sino también en Lanzarote. Gimeno reprobó que el hombre hubiera utilizado como excusa que le habían robado la documentación y que esa era la causa de que este martes estuviera sentado en el banquillo de los acusados.
Cerró unilateralmente
Según el fiscal, quedó acreditado que el empresario suscribió el día 24 de febrero de 2020 un acuerdo de explotación conjunta de un local específico de apuestas externas con la entidad Sportium Apuestas Canarias SLU, ubicado en la calle Cronista Batllori Lorenzo de Las Palmas de Gran Canaria y que conforme a ese contrato, el encausado era únicamente depositario del dinero recaudado por las apuestas que se realizaban en el local, siendo propietario del mismo la entidad Sportium Apuestas Canarias SLU.
El empresario cerró el establecimiento de apuestas de forma unilateral, el día 8 de febrero de 2021 y está acusado de quedarse con 467.089,36 euros fruto de las apuestas realizadas y que nunca procedió a devolver a la entidad Sportium Apuestas Canarias SLU, a pesar del requerimiento notarial realizado el día 9 de marzo de 2021; y de los burofaxes enviados los días 25 de febrero de 2021 y 5 de marzo de 2021.
Seis años de cárcel
Para la Fiscalía los hechos son constitutivos de un delito de apropiación indebida y solicita para el acusado la pena de 6 años de prisión y una multa de 18 meses a razón de 10 euros de cuota diaria, además del abono de las costas judiciales.
La defensa ha pedido la libre absolución.