Los hechos ocurrieron en junio y julio de 2016, cuando el niño acudía a casa del condenado a jugar con la Play Sation en ocasiones en las que no había nadie más en la casa, indica la sentencia.
En esos momentos, el condenado, nacido en 1953, practicó varias felaciones al menor con el argumento de que así le crecería el pene, según relató el niño a su madre y a su abuela.
El hombre ha sido condenado por un delito continuado de abusos sexuales a un menor de dieciséis años, y además de diez años y un día de prisión, se le imponen cinco años de libertad vigilada cuando cumpla la pena, la prohibición de acercarse al niño durante trece años y una indemnización de 6.000 euros a los padres del menor.