El Tenerife 18-19 tiene algunos defectos estructurales, con la falta de gol o la fragilidad defensiva a la cabeza, que obligan a considerar como posible la opción del descenso a Segunda División B. Además, en Soria no sólo perdió tres puntos sino la posibilidad de cambiar una dinámica que ayudara a tapar unos defectos ligados a una mala construcción de la plantilla. O al menos, a una construcción 'populista' y excesivamente optimista.
Los blanquiazules se enfrentarán en su próximo compromiso ante el Albacete, en el Heliodoro Rodríguez LópezNos explicamos. Las decisiones de renovar a Etxeberria o de repatriar a Nano como estrella parecen más ligadas a la presión de un entorno interesado que a razones futbolísticas. Y esperar que Naranjo recupere su mejor versión en la Isla, donde se le mira con lupa y sin indulgencia, es propio de los que creen en los Reyes Magos. Además, no reforzar la zaga o prescindir de los mediapuntas son pecados por los que se hará penitencia todo el curso.
Si los defectos reales del Tenerife 18-19 ya invitaban a la preocupación, en Soria explotó un nuevo problema que viene para quedarse: las dudas que genera Dani Hernández en la portería. Los errores cometidos ante Zaragoza y Alcorcón se repitieron contra el Numancia –con 'ayuda' arbitral– con el resultado de derrota. Y eso sitúa al portero –y por extensión, a Oltra– en el centro de la diana de cara a la cita del domingo ante el Albacete.
El técnico dijo antes de ir a Soria que no iba a alimentar el debate... pero debe tomar una decisión. Y la catarata de críticas es previsible, haga lo que haga. Además, el choque ante el Albacete va a alimentar en la Isla un nuevo tipo de 'duelo': la batalla de secretarios técnicos. La condición de tinerfeño de Mauro Pérez, director deportivo del Albacete, es una invitación –para algunos medios– a 'enfrentarlo' con Alfonso Serrano y reinventar el periodismo.
A lo largo de la historia, la prensa ha 'vendido' duelos Messi-Cristiano, Guardiola-Mourinho, Suárez-Benzema y hasta Florentino-Laporta. Y el argumento funciona igual en los Madrid-Barça que en cualquier otro partido. Se comparan futbolistas de una posición más o menos similar, técnicos y hasta dirigentes... pero en la Isla somos diferentes y esta semana no vamos a comparar las parejas Zozulya-Malbasic o Ramis-Oltra.
Háganme caso, esta semana lo que va a 'vender' es el 'duelo' Serrano-Mauro. En un Tenerife plagado de dudas futbolísticas, que no ha definido su estilo, que modifica el dibujo cada semana y que puede hasta cambiar de portero, es posible que los análisis de los medios no miren al césped sino a los despachos. Llegado el domingo y alcanzada la 'obligatoria' conclusión de que Serrano debe irse, los problemas seguirán estando en el césped.