Este fin de semana el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través de la concejalía de Movilidad, volverán a activa el carril bus de prueba en el litoral del pueblo de San Andrés para seguir los análisis del tráfico en la zona de acceso al barrio y a la playa de Las Teresitas, punto histórico de grandes colas en verano y en los fines de semana.
Sin embargo, las primeras pruebas no solo no han convencido a los vecinos y empresarios de la avenida litoral, sino que afirman que no está siendo ninguna solución.
Valoración vecinal
Así, el presidente de la Asociación de Vecinos El Pescador de San Andrés, Gabriel Rodríguez ha concedido una entrevista a Atlántico Hoy, donde asegura que “el carril bus no soluciona los problemas de colapso de tráfico”.
“Todo empezó en una buena línea de actuación por parte del ayuntamiento y el área de Movilidad y el distrito de Anaga de contar con los vecinos en una convocatoria para explicar en qué consistía el planteamiento del carril”, avanza.
Sin embargo, recuerda que en la primera prueba las condiciones climatológicas no acompañaron para saber si la prueba fue exitosa o no. “En la segunda se comprobó que solo hubo un 6% de incremento en el pasaje en el transporte público, que para nosotros eso es ínfimo”, señaló, antes de contextualizar el porqué. “Coincide con la entrada del verano, lo que es normal que aumente, ya no por el carril bus, sino porque cuando se acaban las clases y empieza el verano a avanzar hay un incremento del transporte público y de coches”.
Enfado en los empresarios
El sector más afectado es el de los empresarios de restauración. “No hay uno solo que esté a favor del carril bus, porque han visto descender la clientela y las ventas por su implantación”.
En este sentido, explica Gabriel que los clientes que han reservado, al enterarse de la supresión de aparcamientos por el carril bus cancelan sus reservas. “También hay mucha gente mayor que disponía de los aparcamientos enfrente de los de los bares y ahora los tienen más lejos, en la playa, que encima se llena”, se lamenta le representante vecinal. “Sin ir más lejos, el fin de semana pasado un vecino me envió un vídeo en el que desde las 10:30 de la mañana las colas llegaban hasta la dársena con el carril bus. Por lo tanto, el carril bus no me soluciona los problemas de colapso de tráfico”, añade con firmeza.
Aumento en los jóvenes
Valora Gabriel que lo único que favorece este carril -por ahora en pruebas- “es el uso del transporte colectivo en un determinado perfil de usuarios de la playa, cómo son los jóvenes, porque las familias acuden a la playa con su coche, con sus niños, sus carritos...”.
Asimismo, reconoce “no compensan los perjuicios que acarrea a los empresarios y a los vecinos de la zona la supresión de los aparcamientos para que me digan que haya aumentado un 16% el transporte público, como se vio en la segunda prueba, pero insisto, es normal porque es verano y aumentan los visitantes y los coches a la playa. Pasa todos los años, no por el carril.
Es la postura y las conclusiones que sacan los empresarios y los vecinos y, sobre todo, los que también van hacia Taganana y los vecinos del Suculum, que tienen que cargar con la cola. “No se puede desvestir un santo para vestir a otro. Además, cuando la cola llega fuera de San Andrés también es para las guaguas que, encima, cuando llegan a la parada del castillo tienen que incorporarse al carril de la cola y se va generando un retraso en las frecuencias de guaguas”, expone Gabriel.
Buscar otro método
Por todo ello, Rodríguez expresa que el Ayuntamiento de Santa Cruz tiene que buscar otro método. “Hablaban de una especie de sensores como los semáforos que avisan a la gente para que nos acudan cuando está la playa llena, como lo que han hecho con Las Gaviotas y Las Teresitas cuando el COVID, pero no era un resultado real”.
Con respecto a las reuniones entre la administración y los vecinos, Gabriel indica que tienen una respuesta del alcalde, José Manuel Bermúdez, que quiere reunirse con los empresarios y con los vecinos para explicarles el contenido y los resultados. “Esperemos que sea pronto, porque si la reunión es a finales de agosto o a principios de septiembre ya ha perdido toda la eficacia”, finaliza.