El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Santa Cruz, Guillermo Díaz Guerra, ha admitido este jueves que desde la gerencia no se ha actuado con la suficiente “autoridad” en materia de urbanismo y ha reconocido que “hace falta más severidad en los expedientes” de las empresas que operan en la Montaña de Taco. Al consistorio solo le constan nueve actividades diferentes que se desarrollan en la montaña, de la que la empresa Excavaciones Machín acumula hasta 10 expedientes por diferentes motivos.
Los expedientes de los que se tiene constancia desde el área datan desde 2016 en adelante, “con una especial intensificación de 2019 en adelante”. La laxitud de Urbanismo a lo largo de las décadas en lo relacionado a la sanciones en cuestión urbanística ha llevado al concejal ha admitir que la gerencia “no ha ejercido la disciplina urbanística como debía” y ha recalcar en la “falta de autoridad” por haber dejado pasar afecciones que ya han prescrito.
Estas contundentes críticas contra los anteriores responsables de área las ha realizado el concejal en la sesión de control al grupo de gobierno celebrada este jueves a raíz de una comparecencia solicitada por el Grupo Unidas Podemos para que informara de los expedientes impuestos por diversas actividades en la Montaña de Taco. Todos los intervinientes han destacado el deterioro notable que ha sufrido a lo largo de los años esta montaña, declarándola incluso como uno de los mayores “atentados medioambientales” de la isla, como comentó la concejal del Grupo Mixto Matilde Zambudio y suscribió el concejal de Unidas Podemos Ramón Trujillo.
Sanciones en la Montaña de Taco
Según los datos comentados por Díaz Guerra, al Ayuntamiento solo le constan nueve actividades que se desarrollan en este terreno. La empresa Excavadoras Machín es la que más expedientes acumula. Hasta 10 expedientes sancionadores tiene la empresa dedicada al tratamiento de residuos de obra y demoliciones de la construcción, aunque tan solo dos se mantienen activos, de 2012 y 2019, que ascienden hasta los 39.000 euros. Según ha explicado el concejal, uno de los expedientes a la empresa es de finalización de actividad con reposición del estado anterior de los terrenos y otro por actividad clandestina.
Pero hay otras actividades que también han sido objeto de expedientes que no necesariamente han terminado en sanción. Es el caso de la empresa Machacadora Alsaca del Castillo que cuenta con una autorización de machacadora y cribadora y a la que “se abrirá un expediente disciplinario por si no se estuvieran cumpliendo los términos de la autorización”, según anunció el concejal.
Misma situación sucede con otra “antigua actividad industrial” a la que se le iniciará un expediente para “ver si al menos existe algún tipo de responsabilidad urbanística que no hubiese prescrito como puede ser la reposición del suelo al estado anterior”. Constan otros expedientes de actividades clandestinas, de construcciones no identificadas o por obras no autorizadas, entre otros.
El concejal de Unidas Podemos lleva varias semanas preguntando al Ayuntamiento sobre las sanciones impuestas y asegura que está sorprendido de que “solo se han puesto dos sanciones”. Lo comenta porque, según ha explicado, les han llegado quejas de vecinos relativas a vertidos de aguas negras, restos de bombonas, amianto y escombros. Aunque Díaz Guerra asegura que esas quejas no han sido formalizadas como denuncias.
Aumentan las inspecciones
Lo que ha quedado claro de la intervención del concejal es que “la Montaña de Taco está fatal” y “hace falta más severidad en los expedientes”, tal y como ha comentado Díaz Guerra y han suscrito el resto de políticos. Por ello, se prevé que en los próximos meses se lleven a cabo más inspecciones para controlar el deterioro de los terrenos.
Se prevé que toda esta zona sea fruto de rehabilitación del suelo para la construcción de un parque y zonas verdes. Un proyecto que cuenta con financiación europea, por lo que deberá realizarse antes de finalizar 2023.