Tras años de lucha por los vecinos de San Andrés por recuperar el cementerio de Traslarena, las instituciones públicas comenzaron en 2023 la rehabilitación del mismo, empezando por los muros en una primera fase ya terminada -a espera que la burocracia de la luz verde próximamente para continuar-.
Ahora, un descuido por desconocimiento durante unas obras en el acceso a los aparcamientos nuevos de la playa de Las Teresitas puso en riesgo la estructuro del reformado muro.
Escombros contra el muro
En este caso, la montaña de escombros generada por la pequeña obra fue depositada junto al reformado muro, cuando no es de carga, por lo que podía haber afectado gravemente a su estructura y, posible derrumbe en la zona. “A mí me parece una falta de respeto y consideración, porque creo que desconocen el valor histórico del cementerio”, comenta a Atlántico Hoy Marcos Cova, uno de los representantes vecinales que más ha impulsado la rehabilitación de la histórica edificación.
Una afección que los vecinos conocen muy bien, porque ya falló el muro en otra situación similar en la zona que da hacia la playa. “Hace unos dos años, con las obras de los paneles solares de los kioskos, sacaron una cantidad de escombros tremenda y las pegaron a los muros que dan a la playa. Desde el minuto cero lo puse en conocimiento del Distrito de Anaga y les dije que los escombros iban a romper el muro, que es de tosca roja y piedra, sin cemento. Efectivamente, rompieron los muros”, recuerda a modo de queja. “Estuvimos ocho meses detrás del ayuntamiento para que se pusiera en marcha la reparación”, agrega.
Ahora, los nuevos trabajos trabajos para la instalación del semáforo han recreado la delicada situación en otra facción de la estructura, pero la repidez en los tiempos de aviso y respuesta han evitado el mal mayor. “Avisé al Distrito para ver si iban a volver a las andadas y si no les sirvió de escarmiento lo de la otra vez”, explica Marcos Cova. “No acabo de entender a quién ponen a cargo de las obras y no les advierten que no pongan nada al lado de los muros del cementerio”, abunda.
Respuesta rápida
Afortunadamente, 48 horas después del aviso, el Ayuntamiento de Santa Cruz, a través del Distrito de Anaga, ha puesto solución para evitar un probable mal mayor, transmitiendo a primera hora del viernes a la empresa constructora para que reubicaran los escombros.
“No todo el mundo tiene la conciencia de que aquello es un BIC y un tema importante”, comenta al respecto Samuel Suárez, del Distrito de Anaga, a Atlántico Hoy. “Piensan que puede ser cualquier cosa”, agrega con empatía sobre la empresa, recordando que le Jefe de Mantenimiento de Vías ya había dado la orden con anterioridad.
La rehabilitación
Esta primera fase de la rehabilitación del cementerio centrará los esfuerzos en los muros, construidos en 1911. Posteriormente, se acometerán las obras del cuarto de autopsias (capilla), el camino, la vegetación y el suelo.
La segunda fase, siempre contando con el consentimiento de los familiares, acometerá la mejora de las lápidas y tumbas, que ya reformaron los propios vecinos.