El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha iniciado una campaña de inspección de terrazas de mesas y sillas tras la constatación de diversos incumplimientos de las ordenanzas municipales aplicables.
Las inspecciones correrán a cargo de las áreas de Patrimonio Municipal y Urbanismo y tendrán como prioridad velar por el cumplimiento de la normativa en materia de accesibilidad universal, detalla la corporación local en un comunicado.
Varias denuncias
El edil de Patrimonio Municipal, Javier Rivero, explica que la iniciativa surge tras comprobar los inspectores municipales del Servicio de Patrimonio y Ocupación del Espacio Público las denuncias cursadas por la Policía Local, la Gerencia Municipal de Urbanismo y varios vecinos.
El objetivo, continúa Rivero, es "corregir ubicaciones o instalaciones inadecuadas con la finalidad de que las aceras sean accesibles y permitan el tránsito de personas con algún tipo de discapacidad o problemas de movilidad".
Ejemplos concretos
La concejal de la Gerencia Municipal de Urbanismo, Zaida González, pone ejemplos concretos, como locales con permiso para desarrollar la actividad pero sin licencia de terraza, así como locales con permiso de terraza pero que exceden la autorización concedida.
González indica que la finalidad de esta campaña "no tiene carácter sancionador sino que la pretensión es de que los titulares de los negocios regularicen o cumplan con la licencia otorgada".
En qué consiste
El procedimiento consistirá en efectuar visitas de inspección con notificación de los incumplimientos al interesado, situación que prevé una nueva visita a los 15 días para comprobar si se han subsanado los incumplimientos, que en el caso de que no se haya atendido, en 72 horas se podrá retirar la terraza.
La campaña de inspecciones se extenderá desde este mes de octubre hasta diciembre y se tendrá en cuenta el cumplimiento de la Ordenanza de Paisaje Urbano de Santa Cruz de Tenerife, que detalla los supuestos de incumplimientos regulados en la ordenanza.
Actuaciones inmediatas
En la misma se tipifica el riesgo para la seguridad de las personas o bienes, supuesto en el que se producirán actuaciones inmediatas por parte de los servicios municipales, sin previa resolución administrativa.
Otro supuesto es aquel en el que la instalación de la terraza no disponga de título habilitante, con procedimientos disciplinarios, falta de pago de tributos, situación en la que la ordenanza contempla la revocación por resolución motivada y sin derecho a indemnización, caso en el que se ha de retirar las instalaciones en el plazo de siete días, previo requerimiento, o bien ejecución subsidiaria.
Las multas
O aquellas sin autorización, caso en el que se podrán retirar en cualquier momento de la vía pública y se depositarán en almacenes municipales por un máximo de diez días, sin perjuicio de la posible incoación del procedimiento sancionador.
En el capítulo de infracciones, sanciones y procedimiento de la ordenanza se tipifican las infracciones como muy graves, graves y leves, que contemplan multas de 1.501 euros hasta 3.000 euros; 750 euros hasta 1.500 euros, y de 60 euros hasta 600 euros, respectivamente.