El Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) de Santa Cruz de Tenerife se ha comprometido a pagar y gestionar, en cuestión de una semana, un alquiler adaptado a la familia de Hugo, el joven que el pasado 13 de julio se quedó tetrapléjico en Güímar tras tirarse al mar de cabeza en una zona poco profunda.
Desde hace meses, la madre del joven, Jennifer de la Rosa, está pidiendo ayuda de manera pública para poder afrontar un cambio de vivienda. Tras el accidente, Jennifer tuvo que dejar su trabajo y su alquiler para irse junto con su hijo al Hospital Medular de Gran Canaria, donde Hugo está ingresado.
Varios políticos han intervenido por Hugo
Allí, Jennifer vive en un piso cedido por la Cruz Roja, pero necesita una vivienda en Tenerife para cuando retornen. La madre de Hugo pidió hace meses ayuda al Ayuntamiento de Santa Cruz. Según publicó el pasado lunes Diario de Avisos, el consistorio aún no había respondido. En diciembre, Jennifer acudió al diputado del Común, Rafael Yanes, para que interviniese solicitando respuesta al consistorio.
La concejal del Grupo Mixto en el pleno, Matilde Zambudio (Cs), preguntó también al Gobierno municipal sobre la cuestión. Este jueves, el pleno de Santa Cruz de Tenerife ha dado respuesta a Zambudio, que la ha compartido con Atlántico Hoy.
La opción más rápida
El IMAS baraja tres opciones, de las cuales la más rápida sería la expuesta en los primeros párrafos de este artículo de pagar y gestionar un alquiler a la familia con una semana desde que Jennifer encuentre un piso en arrendamiento que valga para sus necesidades.
"Búsqueda por la persona interesada de una vivienda de alquiler en el municipio, solicitar al IMAS las prestaciones de fianza e intermediación inmobiliaria en su caso y la prestación económica de alquiler -hasta 3.000 euros anuales-, que gestionaríarmos por vía de urgencia y en una semana se podría tener activadas las prestaciones necesarias para la firma del contrato de alquiler", reza ese apartado.
La madre, disconforme
Tras recibir la respuesta del ayuntamiento, Jennifer ha reflejado en su página de FaceBook que la prestación ofrecida por el alquiler no le parece suficiente: "El alquiler por vulnerabilidades es de 3.000 euros anuales, es decir, 250 euros al mes. ¿Donde encuentran ellos un piso por 250 euros al mes? Si el alquiler cuesta 500 euros mínimo, ¿los otros 250? ¿Eso es un alquiler social para una persona que cobra 600 euros?
"Nada más que decir, seguiré batallando hasta mi último suspiro, exponiendo todo públicamente porque la gente que va detrás de mí empujándome merece, como mínimo, esta transparencia", ha zanjado.
Soluciones más lentas
Las otras dos ofrecidas son más lentas. Por un lado, el IMAS sugiere la "adjudicación de una vivienda pública por el Instituto Canario de la Vivienda, siempre que sea solicitante registrada de vivienda y cumpla con los requisitos exigidos por dicha administración". Para esta opción, la directora del instituto, Rosario González Carballo, ha solicitado reunirse cuanto antes con la directora general de Viviendas del Gobierno de Canarias para abordar específicamente el caso de Hugo.
La tercera opción consistiría en, siempre que Jennifer sea solicitante de vivienda, "entrar con la baremación procedente en la lista de familias en situación de alta vulnerabilidad social para viviendas de segunda adjudicación del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife y esperar a que quede libre alguna vivienda". Un proceso que podría alargarse indefinidamente.
La familia de Hugo teme no encontrar una vivienda para adaptarla y que su caso se enquiste como ocurrió con el de Miguel Planas, otro joven grancanario que se quedó tetrapléjico hace tres años y lleva desde entonces viviendo en el mismo Hospital Medular en el que se encuentra ahora mismo el joven tinerfeño.