Sacyr, compañía que gestiona Emmasa, la empresa de aguas de Santa Cruz, tiene hasta que acabe 2023 para completar la ampliación de la desaladora por valor de 21,6 millones de euros para cumplir con lo acordado con el ayuntamiento.
En junio de 2022, el concejal de Servicios Públicos de la capital, Carlos Tarife, explicó en un escrito para el Grupo Municipal de Unidas Podemos que la empresa tenía que ejecutar las fases B y C de la desaladora en las anualidades de 2022 y 2023 por un valor de 22 millones de euros, de los que sólo se han invertido 400.000.
Renegociación de la inversión
En junio de 2022, Sacyr había invertido 11,9 millones de euros de fondos propios en Emmasa en el marco de una inversión comprometida por su convenio con el ayuntamiento de 33,9 millones.
A su vez, estos 33,9 millones eran el resultado de una renegociación de las inversiones propias realizada en 2015, puesto que originalmente el compromiso era de invertir 45 millones de euros. Los 22 millones que quedaban hasta completar los 33,9 eran para esas fases de la desaladora, explicó en junio el concejal de Servicios Municipales.
Sólo 400.000 en un año
A fecha de abril de 2023, según un nuevo escrito de Tarife, Sacyr sólo ha invertido 400.000 euros más que hace casi un año. Los fondos propios invertidos por Sacyr han pasado de 11,9 millones de euros en junio de 2022 a 12,3 millones, según informa Tarife, y quedan ocho meses para cumplir el convenio de ampliación de la desaladora.
La concesión a Sacyr durará hasta 2031, dado que la licitación que ganó en 2006 concedía la gestión del agua durante 25 años. Una vez termine la concesión, Sacyr venderá a Emmasa su participación por el valor nominal de las acciones.
Sobre las obras por valor de 33,9 millones de euros de inversión propia, que según Tarife tendrían que invertirse este año, el edil ha aclarado que no serán objeto de compra por Emmasa, sino que estarán incluidas en el traspaso de la propiedad de la gestión del agua cuando Emmasa compre las participaciones de Sacyr.