Después de haber sido protagonistas de dos carteles del Carnaval (2019 y 2023), Nareme Melián recibió la propuesta definitiva que todo ilustrador que ama esta fiesta sueña con recibir: crear el escenario del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife.
Este jueves se inauguraron los concursos sobre su creación con las murgas infantiles, pero durante la mañana de la jornada se presentó ante los medios la construcción del escenario ideado por Melián y que tenía como guion la temática elegido para las Carnestolendas, la televisión.
Concepto abstracto
“A la televisión la podemos recordar como esa televisión de oro de España de los 90, que, si Chicho Ibáñez Serrador con el Un, dos, tres, después el Qué apostamos… Pero ha evolucionado tanto que las nuevas generaciones no sé si sabrían lo que ven si yo pongo una Ruperta o televisiones tradicionales”, expresa Melián en una entrevista concedida a Atlántico Hoy.
Por ello, decidió enfocar la temática con un concepto de la televisión como “abstracta” y cómo la televisión, al igual que la fotografía, “ha marcado las generaciones y ha dejado latente con imágenes la evolución del Carnaval”.
Platós históricos
Así, Nareme se ha apoyado e inspirado en elementos propios de la historia del carnaval chicharrero y los epicentros de sus concursos. “Esos diferentes platós que ha tenido a lo largo de la historia y cómo el carnaval también ha reconstruido esos lugares”, contextualiza. “Hablamos del Teatro Guimerá, quien en aquella sociedad era de acceso solo para la burguesía y un perfil de gente y que, gracias a la evolución de la sociedad, la cultura ya es para todos y cómo el Carnaval lo transformó y ya entró el pueblo”, añadió.
Otro plató histórico que se deja ver en el escenario de Melián es la plaza de toros. “Se usó para una cosa muy poco tiempo, pero se quedó como emblema del Carnaval”, apunta. También hay trazos de la antigua plaza de España. “Era un movimiento del sistema político y es también el cómo se ha transformado que al final no lo vemos con ese simbolismo político, sino como un simbolismo del Carnaval”, expone. “Al final está todo guardado en este gran caja, que es dentro del Recinto Ferial”, abunda.
Aspectos técnicos
Profundizando en el diseño más técnico, Nareme reconoce su obsesión con el tema de los acabados. “Son diferentes materiales, pero al final parecen todos del mismo material porque es como una gran caja de LEGO”, reflexiona haciendo mención a la diversidad de colores.
También quiso recordar esos platós antiguos que eran de madera y muy grandes y, sobre todo, “que la gente del carnaval lo que quiere es volumetría”. De esta manera, rememora esos carnavales de los años 90. “De ahí el icono del Súperchicha, que a mí me marcó de pequeño, al igual que el King Kong, que fueron de los primeras esculturas que se pusieron en la plaza de España”, argumenta Nareme.
Después, los problemas con la carta de ajuste. “Es verdad que el equipo de iluminación estaba ahí un poco dudando con los colores, pero está todo muy acorde y parece algo muy MTV y muy popero. Sobre todo, para las nuevas generaciones, que también sientan que cuando sean mayores digan que se acuerden que para mí fue el King Kong rosado, que para otros generaciones fue el King Kong de los 80”.
De cartel al escenario
Por último, Melián señala que el proceso de crear un cartel y un escenario, obviamente, “es muy diferente porque, con el cartel el papel aguanta todo”, pero en relación con el escenario había aspectos en el que ha recibido la ayuda necesaria. “Eduardo Cruz me ayudó a tener cuidado en las curvas porque hay que tener cuidado por el ángulo, y después con Fernando trabajé toda la parte técnica del montaje”. No obstante, su mensaje de cierre es claro. “Da igual la modalidad, lo importante es contar historias y que la gente, cuando lo vea, cada uno interprete bajo su propia experiencia”.