"En Santa Cruz hace falta trabajo. Lo estamos pasando mal, como en todas las islas, y sobre todo los jóvenes", explica a Atlántico Hoy Estefanía Hernández Ramos, presidenta desde 1995 de la cooperativa del mercado santacrucero de Nuestra Señora de África. "Los autónomos también lo estamos pasando mal, los impuestos nos comen", añade.
Estefanía habla con Atlántico Hoy para ofrecer su visión sobre qué necesita la capital tinerfeña una vez pasen las elecciones y comience una nueva legislatura. Al próximo alcalde o alcaldesa, la presidenta del principal mercado de la ciudad le pide que mantenga las medidas de reducción de impuestos a los autónomos que ha implementado esta legislatura el gobierno compuesto por Coalición Canaria y Partido Popular, con medidas como la retirada del tributo de basuras o la bajada del IBI.
Hernández cree que hay que ayudar al pequeño comercio como motor de la ciudad para que esto repercuta también en el crecimiento del empleo. "Así la gente no tendría que irse de Canarias ni depender de las ayudas", detalla.
Encarecimiento de la vivienda
La presidenta del mercado de África apunta también a otro problema del acceso al empleo en la ciudad: el encarecimiento de la vivienda que impide a muchos trabajadores de Santa Cruz vivir en la ciudad, impactando además en la congestión de las carreteras de acceso y salida a la capital en horas puntas.
"He vivido del comercio muchos años y creo que este es el momento más complicado de entre todas las crisis que hemos pasado", explica Estefanía. Desde su experiencia, cuenta que no hay gente para trabajar porque muchos han emigrado y los que quedan buscando trabajo se ahuyentan por los precios del alquiler y los problemas de movilidad. Precios que afectan también a los propios alquileres de los negocios.
"Ayudar a la gente"
"En Santa Cruz ha sido un alivio importante que se hayan bajado los impuestos no solo al autónomo, sino también al vecino", destaca la presidenta, que asegura que quienes trabajan en el mercado de África ven cada día muchas penurias de los vecinos y sus necesidades.
"Hay que ayudar a la gente. El precio de la electricidad está por las nubes. Hay gente que no enciende el calefactor ni la televisión, que lo está pasando mal", lamenta Hernández, que pide a los gobiernos de todas las administraciones que, por lo menos, dejen a los ciudadanos "más dinero en sus bolsillos".