El
rastro de la capital tinerfeña, que se cerró antes de los carnavales del pasado año, está previsto que reanude su actividad antes de que finalice febrero, ha dicho este viernes a Efe Carmen Tejera, presidenta de la Asociación del Rastro de Santa Cruz de Tenerife.Carmen Tejera ha explicado a Efe que el alcalde de la ciudad,
José Manuel Bermúdez, la llamó el jueves para comunicar que una vez la isla ha pasado a la
fase 1 en lo que respecta a las medidas adoptadas con motivo de la pandemia de
coronavirus, el rastro podrá reanudar su actividad.Algo que se llevará a cabo en la
explanada próxima al Cabildo de Tenerife, en la zona en la que se ubican las atracciones del carnaval.
Cierres anteriores
El rastro cerró en enero debido a las lluvias y el cierre se mantuvo durante el carnaval, así como durante las dos semanas siguientes por la lluvia, y luego el 14 de marzo llegó el confinamiento, ha recordado Carmen Tejera.En aquel momento había
631 puestos en el rastro de la capital tinerfeña y
la apertura se hará con los 412 que han renovado las licencias, en un perímetro acotado de entrada y salida, y con separación de un metro y medio.Carmen Tejera ha indicado que es
imposible abrir este fin de semana y muy difícil hacerlo el siguiente, debido a que hay que organizar el contrato de seguridad y poner la numeración de los puestos.Los puestos tendrán dos metros para que puedan tener cabida los 412 y
la ubicación será provisional, ya que, ha declarado Carmen Tejera, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife se ha comprometido a que volverá a la zona de la Recova cuando haya seguridad sanitaria, y por ello el decreto de traslado no es definitivo.Carmen Tejera ha comentado que la ubicación tradicional es menos segura debido a que hay muchas calles de acceso y es más difícil el control, pero, ha insistido,
el acuerdo es regresar a esa zona. Medidas de seguridad
Las medidas de seguridad serán las mismas que en cualquier centro comercial, y así en el rastro habrá geles y el uso de mascarillas será obligatorio.La previsión es reunirse la semana próxima con el alcalde para firmar el acuerdo, ha señalado Carmen Tejera, quien ha señalado que si bien se reanudará la actividad con 412 puestos más adelantes se hará un sorteo para que pueda haber 631, como antes del cierre.Carmen Tejera ha declarado que la intención era que se pudiera abrir en la fase 2, porque no se entendía que en el archipiélago se abrieran otros rastros y no el más grande de las islas, y por ello entre los vendedores se ha creado crispación.Algunos de esos vendedores creían que Carmen Tejera no los defendía lo suficiente, ha reconocido la presidenta de la asociación, quien ha apuntado que desde las administraciones se "ponían pegas" porque cree que "nadie quería arriesgarse a dar los permisos".Durante este año se ha pasado "muy mal" y cuando el alcalde la llamó para decir que había licencia "se me saltaron las lágrimas", pues hay que tener en cuenta que si bien algunas de las personas que están en el rastro perciben pensiones no contributivas y otras ayudas la cantidad es pequeña e insuficiente para cubrir todas las necesidades.Por ello, la gente está "desesperada", ha destacado Carmen Tejera, quien también ha señalado que las ventas han caído mucho en el rastro en los últimos años debido a que se han abierto muchas tiendas que venden los mismos artículos o similares.Carmen Tejera ha asegurado que tanto con el alcalde, José Manuel Bermúdez, como el concejal Guillermo Díaz Guerra, como con los responsables de la Consejería de Sanidad del Gobierno canario, ha habido entendimiento pero, ha opinado, "no voluntad".