La alegría de los cientos de argentinos que viven en Santa Cruz de Tenerife se ha desatado después de que Lucas Montiel marcase el penalti que le daba a Argentina la Copa del Mundo.
Tras una final de infarto ante Francia, con dos remontadas de los galos a base de un hat-trick de Mbappé -una en los últimos diez minutos del tiempo reglamentario y la otra en la segunda mitad de la prórroga-, el partido se ha resuelto en la tanda de penaltis.
Una parada del arquero "Dibu" Martínez en el segundo penalti y un fallo de ejecución del galo Tchouaméni en el tercero de Francia dejaron a la selección del gallo tocada de muerte. El acierto de Montiel le dio la victoria a los de Scaloni y Argentina entera salió a la calle.
Calles cortadas
Pero Argentina no está sólo en Latinoamérica, está allá donde haya un argentino dispuesto a salir a cantar por su selección, como ha pasado en el corazón de Santa Cruz.
Cientos de personas se han concentrado junto a la oficina de turismo de la plaza de España, obligando a la Policía Local y Nacional a cortar los accesos.
La celebración ha coincidido en tiempo y espacio con el mercadillo de Navidad capitalino, repleto de bares donde los aficionados argentinos han podido celebrar su victoria.