El Teleférico del Teide, ubicado en el Parque Nacional de las Cañadas del Teide, ha inaugurado recientemente un sistema de propulsión para sus cabinas que se alimenta completamente de energía solar fotovoltaica.
Esta innovadora instalación marca un hito al reducir a cero las emisiones de CO2, lo que la convierte en la primera experiencia de un sistema aislado en el mundo que funciona con energía solar.
Teleférico marca el camino
La implantación de esta moderna estructura, que combina placas fotovoltaicas con un sofisticado sistema de almacenamiento y distribución inteligente de energía, garantiza el suministro eléctrico necesario para el funcionamiento de la instalación. Una auténtica revolución que, sin duda, modificará el futuro de la industria de los funiculares en todo el mundo.
Su aplicación implica la reducción total de la huella de carbono de esa infraestructura, lo que consolida a la isla de Tenerife como un destino turístico cada vez más sostenible, donde se combina el disfrute de los espacios naturales con la protección y el cuidado del medioambiente.
Energía garantizada
La instalación está compuesta por una planta fotovoltaica con 525 paneles y una potencia instalada de 240 kW, que permite acumular 1.064 kWh. Pedro Martínez, codirector del proyecto, recalca que “este modelo asegura el suministro eléctrico suficiente y estable”, puesto que al aprovechar la luz solar y el movimiento descendente de las cabinas,queda garantizado el suministro eléctrico suficiente y estable para garantizar el funcionamiento de las actuales instalaciones del teleférico. “El motor, hasta ahora generador de electricidad, solo quedará como reserva para su uso en caso de necesidad o emergencia”, aclara.
En el mismo sentido, Orlando Viera, ingeniero industrial, explica que “debíamos tener en cuenta la demanda de energía”, ya que el teleférico cuenta con cuatro torres y su consumo puede variar significativamente. "Esta energía que sigue siendo diésel la vamos a generar con energía renovable", añade, destacando que este avance convierte al Teleférico del Teide en un pionero en el sector.
Tenerife, en el mapa de la sostenibilidad
Con este ambicioso proyecto, el Teleférico del Teide se posiciona como un referente global en sostenibilidad y tecnología, al marcar un nuevo rumbo para el turismo ecológico en la isla. La presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, resalta que esta iniciativa sitúa a Tenerife “en el mapa de la vanguardia mundial” gracias a “un sistema cien por cien sostenible" que significa "un gran paso en la eliminación de gases de efecto invernadero".
Dávila subraya que, gracias a este importante proyecto de inversión en sostenibilidad en un espacio protegido de máximo rango en España, “el interés del mundo tecnológico se ha despertado ante este ejemplo que hemos dado en la búsqueda de una isla ecosostenible”.
“Nos sentimos muy orgullosos de que se convierta en un símbolo innovador de emisiones cero a la atmósfera”, presume Dávila. “Estamos trabajando para devolver a Tenerife al mapa donde ocurren cosas, con una instalación sin igual en el mundo, que atrae miles de miradas y que, a grandes altitudes, logra operar sin ningún tipo de emisiones a la atmósfera”, resalta la presidenta insular.
Un proyecto ambicioso
Esta nueva instalación para producir energía limpia supone una de las inversiones más importantes de Teleférico del Teide en toda su historia, con un montante de dos millones de euros y financiada mayoritariamente con recursos propios y en un porcentaje menor a través de fondos Next Generation de la UE.
Luis Pintor, ingeniero de caminos y director técnico del Teleférico, comparte que los primeros contactos para el desarrollo del proyecto comenzaron hace más de cinco años. "Esa transición hacia el futuro del teleférico supone ponernos en medio de un parque nacional de la mejor manera posible", destacó.
En una línea similar, también se expresó el director gerente de Teleférico del Teide, Ignacio Sabaté, quien asegura que, “con esta iniciativa queremos enviar un mensaje optimista y comprometido, en el sentido de que se puede y se deben tomar medidas contra el cambio climático. Si nosotros, en unas condiciones técnicas complejas lo hemos podido hacer, cualquier institución, cualquier empresa, debe verse comprometida también en esta misma línea”, sostiene.
Un desafío de la ingeniería
El Parque Nacional del Teide presenta condiciones climáticas extremas, con grandes variaciones de temperatura y una presión atmosférica desafiante debido a su altitud de 2.356 metros, casi el punto más alto de España. Además, se ha sumado el desafío de instalar un sistema complejo sin interrumpir el servicio habitual de las cabinas.
Los ingenieros se enfrentaron a numerosos desafíos técnicos, dado que el teleférico es uno de los pocos sistemas en el mundo que son autónomos eléctricamente y no están conectados a la red pública. Ahora, gracias a los paneles solares, la instalación es completamente autosuficiente y genera su propia energía sin ocupar suelo nuevo del Parque Nacional.
La implementación de este sistema, denominado ESFOR, fue desarrollada por el grupo austriaco Doppelmayr, junto con empresas de innovación canarias y tecnología de almacenamiento de España e Italia. Hans Ullrich Zeller, ingeniero de Frey Doppelmayr, añadió que el objetivo del sistema ESFOR es "reducir u optimizar la demanda de energía" de este tipo de instalaciones.