Instagram se ha convertido a lo largo de los últimos años en la red social por excelencia y la preferida por muchos influencers, creadores de contenido y también empresas, debido a las increíbles posibilidades que ofrece al usuario para darse a conocer, pero también en cuestión de herramientas de venta y marketing. Tras la adquisición de Instagram por parte de Facebook en el año 2012, por la cifra de 1.000 millones de dólares, Instagram no vio ahí su final, sino su nuevo comienzo en muchos aspectos. La poderosa empresa de Mark Zuckerberg se dispuso a trabajar codo con codo con Instagram para llegar a generar una experiencia mejorada para el usuario. El caso de estas dos redes sociales es el de haberse nutrido la una a la otra, hasta haber conformado la que es, según muchos, la mejor herramienta comercial del mercado. La posibilidad de unificar todo el contenido en el Creator Studio de Facebook y la cualidad de la plataforma de poder gestionar las campañas de Facebook e Instagram desde un mismo lugar, ha sido clave para crear el lugar de referencia para creadores y empresas. Una de las funcionalidades estrella de Instagram es la de la stories, que supusieron el boom de la plataforma y que creó el nuevo zapping para los jóvenes (y no tan jóvenes). Su uso es muy atractivo para el usuario, a la hora de ver los contenidos de amigos en la red, pero para las empresas supone un filón comercial, no solo en la modalidad de publicación, sino también como anuncios. Desde el creador de anuncios de Facebook se puede llegar a visualizar cómo un anuncio en concreto se verá en las historias de la conocida red social. De hecho, ha sido tal su éxito, que las stories también se han convertido en una funcionalidad clave para Facebook y para otras redes sociales que también las han incorporado. Son muchas las personas que ansían conseguir más de 10.000 seguidores en Instagram para poder disfrutar de la funcionalidad del “Swipe Up” en las historias, que consiste en poder llevar a tu público a una página web. Esta funcionalidad de la red social se puede llegar a usar como una poderosa herramienta de marketing, pero también de ventas, al ser clave para conformar un embudo de ventas hacia una landing page o una tienda online, por ejemplo. ¿Alguien se imagina actualmente la interacción en redes sociales sin las Stories?