En un archipiélago donde la casa tradicional de paredes blancas es la norma, la tendencia de las casas de madera se está imponiendo, algo que ya forma parte de un movimiento ecológico global. Además, con la voluntad de luchar contra el calentamiento global, cada vez más canarios se replantean sus métodos de construcción y eligen materiales más respetuosos con el medio ambiente. ¿Cuáles son las grandes ventajas de la construcción prefabricada? ¿Cómo podemos construir hoy el mundo del mañana?
La voluntad de cambiar las prácticas de consumo
Hoy en día, el mercado de las casas de madera se está desarrollando considerablemente en Canarias gracias a la creciente demanda de los futuros propietarios. El concepto de construir una casa unifamiliar de madera en una zona suburbana resulta aún más atractivo, especialmente con la tendencia actual a alejarse de las grandes ciudades, para instalarse en zonas más retiradas, y la creciente preocupación por el impacto ambiental.
El consumo excesivo de recursos naturales, la producción masiva de residuos y la contribución al cambio climático son solo algunos de los problemas que enfrentamos como resultado de nuestras prácticas de consumo actuales. Por lo tanto, es crucial que adoptemos un enfoque más consciente y sostenible en nuestras decisiones de compra. Esto incluye el hecho de construir de manera más ética y sostenible y apoyar las empresas como www.pineca.es/casas-de-madera/ que promueven prácticas comerciales justas y sostenibles. Y los canarios son muy conscientes de ello.
La madera: un material con múltiples ventajas
Desde el punto de vista arquitectónico, la madera es fácil de trabajar y no tiene límites. Su naturaleza modular aparece como la respuesta perfecta a la necesidad de personalizar su casa, incluso si se construye a partir de una estructura prefabricada. Ecológicamente, hablamos de un material natural que aísla diez veces más que el hormigón. En la actualidad, las casas de madera también se benefician de una legislación favorable, en particular por las ventajas de la madera como material de construcción que permite cumplir las nuevas normas de regulación térmica de los edificios.
Además de ser más cómodas, saludables y cálidas que una casa tradicional, las casas de madera permiten ahorrar hasta un 60% de energía. Por ello, el Gobierno de Canarias recurre a medidas fiscales para animar a los propietarios a elegir edificios que consuman la menor cantidad de energía posible.
Una industria prometedora en crecimiento
El mercado de las casas de madera, prefabricadas o tradicionales, está creciendo rápidamente y se estima en millones de euros. Debido al entusiasmo para este tipo de viviendas, una multitud de empresas, a veces muy pequeñas, familiares y locales, se han especializado en la construcción con madera y admiten que duplican su facturación cada año.
Además, gracias a la industrialización de los procesos de construcción, que se ha reforzado considerablemente en los últimos diez años, la oferta se ha estructurado mejor y permite responder más rápidamente a la demanda. En la práctica, los plazos de entrega son de seis a ocho meses más cortos, hay rapidez en el montaje y no hay tiempo de secado. Una oportunidad perfecta para construir su propio remanso de paz en el menor plazo posible.
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