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Política

CC retoma el mando con los herreños liberados, Curbelo de vuelta y el plan de Manuel Domínguez

Un año después de las últimas elecciones el panorama político ha cambiado ostensiblemente en el Archipiélago

7 minutos

Manuel Domínguez (PP), vicepresidente, y Fernando Clavijo (CC), presidente del Gobierno de Canarias / EFE

27 de mayo. Un año después de la última jornada de reflexión a la que se vio emplazada la sociedad canaria el panorama político ha cambiado ostensiblemente en el Archipiélago.

Cuatro años de gobierno socialista, acompañado de otras tres fuerzas, dieron paso a un ejecutivo liderado de nuevo -algunos lo llaman un receso- por Coalición Canaria (CC) con el apoyo del Partido Popular (PP), Asociación Socialista Gomera (ASG) y Agrupación Herreña Independiente (AHI).

Un relevo casi total, si no fuera por el incombustible Curbelo, que Atlántico Hoy ha querido testar con los principales protagonistas de sus partidos en el Parlamento de Canarias.

La vuelta de CC

Casi 30 años contemplaban a CC a los mandos del gobierno regional. A izquierda o a derecha siempre mantuvo como formación transversal (entonces no se usaba el palabro, pero CC ya lo practicaba) un porcentaje mínimo de votos que, a veces como primera, otras como segunda -incluso siento tercera fuerza en número de votos, como en 2007 y 2015-, terminó rigiendo los designios de la comunidad autónoma.

El portavoz del grupo nacionalista en la Cámara regional, José Miguel Barragán, comenta a esta diario que “en la anterior etapa nos adaptamos rápido a la oposición” siendo “tremendamente constructivos” con las más de 500 propuestas realizadas.

Considera, por contra, que a la oposición “está costando adaptarse a esta nueva realidad”  de estar en la oposición, “tocados” porque sus partidos -refiriéndose a Nueva Canarias (NC) y PSOE- “basan mucho su liderazgo en una sola persona y no tiene cuadros, en el sentido amplio, para que puedan ser sustituidos de forma adecuada”.

A entender del secretario de organización de CC, “aun parece que están hablando como si estuvieran en el gobierno por el tono de exigencia de lo que hay que hacer desde su perspectiva”. Pese a ello, apunta que, dado el todo de beligerancia de la política nacional actual, “aquí se mantiene la forma, hay discusión, hay discrepancia y dureza algunas veces, pero se siguen aprobando muchas proposiciones no de ley, a veces de acuerdo con la oposición y otras no”.

Mucho anuncio

Cuenta Barragán, al respecto a lo que se han encontrado en estos cuatro años en los que no han gobernado, después de los más de cinco lustros que precedieron a la moción de censura de Manuel Hermoso, algo de lo que ya acusaban al Pacto de las flores hace un años, que “detrás de muchos titulares de periódicos solo había anuncios”

Entre ellos, “muchas relacionadas con la Justicia o la Administración Pública, con las oposiciones en Educación o en la renovación del personal funcionario”.

Menciona también las infraestructuras para la educación infantil de 0 a 3 años, “que era imposible ponerlas en marcha, como se vio al inicio del curso escolar” o las listas de esperas sanitarias.

Relación con el Estado

El portavoz nacionalista entiende que CC ha demostrado en este tiempo que se puede llegar a acuerdo con Madrid y “ser reivindicativo” para trazar una hoja de ruta clara de los asuntos europeos y españoles que tienen que ver con con Canarias.

Pese a ello reconoce que en este tiempo hay una importante discrepancia en lo que tiene que ver con la política de Costas, lo que llevará al Gobierno regional a plantear un conflicto de competencias.

En lo concerniente a la inmigración y las relaciones con Marruecos, considera Barragán que es importante para Canarias el cambio de la legislación para acoger a los menores no acompañados “y que sea un problema de Estado y no solamente de Canarias. A pesar de que la solución no sea 100% satisfactoria sí que es importante que se haya movido ficha después de un trabajo intenso entre el Gobierno del Estado y el de Canarias”.

Puertas cerradas con el PSOE

Una década después de que los caminos de Paulino Rivero y José Manuel Soria se bifurcasen en Canarias, el PP ha vuelto al Ejecutivo regional de la mano de CC, derivada de una “buena sintonía” a la hora de formalizar acuerdos, pero asegura Barragán que "las otras puertas nos habían anunciado abiertamente que estaban cerradas”.

Ahondando en ello, relata que “el Pacto de las flores pensaba que iban a sacar muchísimo más diputados pero no fue así. Al final desapareció una fuerza de extrema izquierda para situar en el Parlamento una de extrema derecha. Ese es uno de sus logros”.

Por ello argumenta que “nosotros teníamos escasas opciones: o se rompía la mayoría del pacto de las flores o hubiéramos estado en la oposición. Desde ese punto de vista la relación con el PP era clara, una de las opciones a valorar y de después cerramos el pacto de forma rápida. En una semana formalizamos el acuerdo en el 80% de las instituciones donde podíamos hacerlo. Eso tampoco quitó para que en otros lugares se pudieran dar pasos con el PSOE”.

"Somos un partido de gobierno y nuestra misión era gobernar”, concluye. “Nadie daba nadie un duro por nosotros. Estaba esa teoría, que surge hace 10 o 14 años, que estaba muy metida en el ADN del PSOE, Nueva Canarias y demás, que cuando nos quitaran de las instituciones nosotros saltaríamos por el aire y nos dividiríamos. Nada de eso ocurrió. Ahí hemos demostrado que somos un partido asentado en Canarias”.

El plan de Manuel Domínguez

Por su parte, el vicepresidente del Gobierno de Canarias y máximo dirigente del PP en las islas traslada a Atlántico Hoy un “valoración positiva” de este primer año de gobierno. “La impronta del Partido Popular se ha hecho notar en materia económica, en materia turística y en política fiscal, algo que nos identifica claramente”, asegura.

En lo referente a su socio de gobierno confiesa que “la relación directa es estrecha y eso nos permite poner sobre la mesa la política y la iniciativa del Partido Popular y la búsqueda de la calidad de vida de los canarios”.

Recuerda para este medio el plan para gobernar que anunció en su primera entrevista tras ser nombrado presidente del Partido Popular en Canarias: “Confieso que se ha ido cumpliendo poco a poco, no al ritmo que me hubiese gustado. El hecho de haber afrontado unas elecciones tan pronto hizo que cambiáramos el plan a medida que iba avanzando el tiempo, pero estoy sumamente satisfecho de los objetivos que hemos ido alcanzando. El partido tiene más músculos, mayor representación en las administraciones y mejor estructura orgánica”.  

“Un partido como el nuestro no nace para apoyarse en nadie ni para que nadie se apoye en nosotros. Poco a poco se van a ir cumpliendo los objetivos que nos hemos marcado. El plan está perfectamente dibujado”, finaliza.

Timple, gofio y Curbelo

Tal vez no el neófito, pero quien conoce de la realidad canaria, y es preguntado por ello, dirá que la inmutable santísima trinidad archipielágica la conforman el timple, el gofio y Casimiro Curbelo, lo más cercano a un recuerdo de Chuck Norris que tenemos en las Islas.

A nadie de los que estaba cerca entonces se le escapa que el presidente del Cabildo de La Gomera prefería en 2019 arrimarse a un gobierno con Fernando Clavijo, al cual apoyó previamente y sin fisuras cuando el PSOE salió por la puerta de atrás en la época del FDCAN, nuestro común amigo.

Los vientos socialistas soplaban en aquel año previo a la pandemia y las erráticas estrategias de pactos de aquel momento -curiosamente, una de aquellas caras visibles terminó formando parte de su organigrama, cosas de la vida- llevaron a ASG a girar a la izquierda (¡pardiez!) y tener una voz destacada en el denominado Pacto de las flores, simbolizada en la todopoderosa cartera de Turismo.

El eterno retorno nietzscheano no afecta a quien siempre está ahí y tras el 28M sus tres inmutables diputados ahí seguían, así que, una vez más, logró sacar rédito de una situación a priori desfavorable. A Clavijo no le hacía falta pero a nadie le amarga un dulce y mentar la palabra consenso es canela fina para los políticos, así que ahí entró de nuevo ASG, con Visocan como pieza de caza mayor. No la mejor, qué duda cabe, pero la presencia se mantiene.

Nuevas incorporaciones

Dos nuevas fuerzas se sumaron al Parlamento de Canarias pasadas las últimas elecciones. La desaparición de Podemos y de Ciudadanos trajo aparejada la llegada de VOX, solo por parte de la provincia de Las Palmas tras no poder concurrir por la provincia de Tenerife debido a cuitas internas. También de la Agrupación Herreña Independiente (AHI), formación que previamente había hecho equipo con CC pero que el éxito de ASG en las pasadas elecciones le hizo tirarse a la piscina regional. No erró en la caída.

Declara Raul Acosta, representante del partido en la Cámara, que “gracias a ver concurrido a las elecciones fuera del paraguas de Coalición tenemos representatividad en todos los asuntos, comisiones y debates en el Pleno”, algo que, reivindica, “da mucha visibilidad no solo al partido sino a la isla de El Hierro”.

Es taxativo al asegurar, en lo concerniente al descuento del combustible, que “si no se hubiera tenido esta presencia seguramente no hubiéramos podido disfrutar de esta de esta bonificación”, al igual que otras inversiones específicas “que si no hubiéramos estado nosotros no se hubieran solicitado”.

En el largo plazo su partido tiene en la agenda cuestiones de política territorial, para dotar de mayor seguridad jurídica y nuevas medidas urbanísticas para fomentar que la población quiera quedarse o emigrar a la isla. “Queremos que sea atractivo que la gente se quede allí a vivir gracias a unas medidas tributarias específicas”.

Acosta cuenta, además, con una labor importante en lo venidero, pues fue designado presidente de la comisión que llevará a cabo la investigación sobre la compra de mascarillas durante el COVID.

“Es un honor y un orgullo que pensaran en nosotros. Vamos a intentar transmitir la seriedad que merece una comisión de este tipo porque la ciudadania quiere saber qué ha pasado”.