Valentín González: “El porcentaje de fugas de agua que hay en algunos municipios es preocupante"

En una entrevista con Atlántico Hoy, el consejero del sector primario en el Cabildo de Tenerife ha insistido en que el agua regenerada es el futuro para la agricultura

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El consejero del sector primario en el Cabildo de Tenerife, Valentín González. / CEDIDA
El consejero del sector primario en el Cabildo de Tenerife, Valentín González. / CEDIDA

El pasado 2023, Valentín González cogía las riendas del área de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Tenerife en un contexto marcado por la crisis del sector primario.

Cuando parecía que nada podía ir peor, el cambio climático hizo mella en las temperaturas provocando sobre todo en islas como Tenerife una escasez de lluvia en meses clave que desencadenó en la sequía. Todo ello unido a la falta de renovación de las redes de abastecimiento o de unas perdidas de agua que en algunos municipios están entre un 40 y un 60 por ciento.

El consenso entre las administraciones públicas y el sector dio lugar a las 75 medidas de la declaración de la emergencia hídrica de Tenerife, la cual no ha tenido precedente. Atlántico Hoy charla con el consejero para desgranar todos los puntos que rodean a esta situación de sequía, las acciones que se están llevando a cabo, así como otras cuestiones que afectan al sector primario como el precio de la alimentación animal, la competencia desleal, la necesidad de dar valor al producto kilómetro 0 o la falta de relevo generacional.

[Pregunta] El pasado mes de mayo entró en vigor la emergencia hídrica en la isla de Tenerife, una medida sin precedentes ¿Es la sequía el problema más serio que tiene Tenerife?

[Respuesta] La sequía es probablemente el problema más serio, porque llevó a esa declaración de emergencia hídrica. Tuvimos que hacer el ejercicio de explicar primero a las organizaciones agrarias y ahora a los productores con reuniones a nivel comarcal, desde el Vilaflor hasta la Isla Baja o Tacoronte Acentejo.

La declaración establece 75 medidas impulsará obras, pero no solo hay que generar más agua, sino que tenemos que ser más eficientes en la gestión de la demanda. Ha sido la decisión de más calado y que influye de una forma decidida en nuestro sector. En el presupuesto de 2024 ya habíamos hecho una inversión muy potente en temas de infraestructuras a través de Balten y con la declaración hemos incrementado en 7,5 millones.

¿Por qué es tan importante?, ¿qué facilita?

Lo que te permite la declaración de emergencia es que la ejecución de las obras sean un poco más ágiles desde el punto de vista administrativo y técnico. Si no, no llegábamos a tiempo al verano. Ahora nuestra apuesta decidida es por el agua desalada o regenerada, porque los recursos convencionales como los pozos y la galerías cada vez son menores y muchos están condicionados por la calidad del agua. 

El futuro de nuestro sector primario va fundamentalmente a través del agua regenerada. En el sur lo hemos percibido desde hace más de 30 años con el agua que se genera en la zona metropolitana y llega a través de la tubería que va paralela a la autopista. Pero en el norte, que siempre ha llovido, también están soportando una situación de tensión. 

Hemos empezado un año complicado. El cambio climático ha afectado muchísimo a los cultivos y no ha llovido lo suficiente. ¿Cómo están las balsas?

Ahora mismo están en torno a un 40%, lo que supone seis o siete puntos por debajo de épocas normales. Los excedentes de invierno son los que nutrían a las 21 balsas de Tenerife, y claro, al no llover en invierno lógicamente los niveles van minorándose en la medida de la demanda. Por ejemplo el año pasado incremento en un 18% con respecto al año anterior. Por ello, había que tomar medidas inéditas como esa declaración.

El Gobierno de Canarias anunciaba que en poco más de un año llegarían a las Islas las desaladoras, dos en este caso a Tenerife, ¿se sabe dónde podrían ir ubicadas?

Tenemos el borrador de ese convenio y efectivamente son dos desaladoras que estarán ubicadas en Santa Cruz y en la Isla Baja pudiendo alcanzar sobre 2.500 metros cúbicos cada una, con uso exclusivo para agua de riego. Por eso comentaba que dentro de las 75 medidas hay varias actuaciones relacionadas precisamente con la generación de agua industrial, porque garantiza la seguridad hídrica para los cultivos.

El agua regenerada es fundamental para concluir el propio ciclo, y en una primera fase esta isla ha tenido un problema serio con los vertidos porque esa agua no puede ir a un emisario al mar sino que debe ser recuperada, y es lo que estamos intentando incorporar en los grandes centros de aguas residuales. Nosotros apostamos por regenerar agua pero sabemos que puede suponer un coste importante para los agricultores, por lo que hay que regularlo y solo se consigue con la incorporación de fotovoltaicas. De hecho, hay un proyecto piloto en La Matanza con un sistema novedoso de placas en la propia superficie del agua.

Una de las denuncias que hacen las organizaciones agrarias es que hay muchas pérdidas de agua en redes municipales, ¿se ha instado a los ayuntamientos a que comprueben sus redes? 

El Consejo Insular de Aguas, en su relación con los propios ayuntamientos, ha evaluado y determinado esas pérdidas. En algunos casos son porcentajes insostenibles, y es verdad que coinciden enormemente con consistorios que tienen una gestión directa del agua o son más pequeños y no poseen una estructura administrativa y técnica potente.

Por ello en la declaración se establecen líneas de financiación entre el Cabildo y esos ayuntamientos para ayudarles a corregir este tipo de cuestiones. Que perdamos entre un 40 y un 60 por ciento de agua es insostenible, porque esa pérdida la podemos reincorporar así como ayudar económicamente para mejorar las redes que están obsoletas.

Dentro de esas 75 medidas está la constitución de la Mesa de la Sequía, que ya se reunió por primera vez y lo hará de forma mensual por lo menos en estos seis primeros meses. ¿Dará sus frutos? 

Desde que el 1 de marzo se iniciara el procedimiento para la declaración de la emergencia no hemos parado. El diálogo no ha cesado, ya sea con el sector o con los ayuntamientos. Precisamente los consistorios nos trasladaron muchas actuaciones que están entre las 75 medidas y el Consejo Insular de Aguas planteó distintas financiaciones para acometer ciertas obras con 10 millones de euros así como los 7,5 millones por parte de Balten, sumando en total 18 millones para las actuaciones junto a las aportaciones de los presupuestos de 2024. 

Las previsiones se van cumpliendo y los informes sobre la situación se van actualizando cada mes. Para algunas acciones ya hemos iniciado el propio expediente, se ha realizado la incorporación de algunos caudales o un análisis de las zonas donde hay pozos así como galerías en desuso. 

La ganadería también sigue inmersa en esa crisis. Se están haciendo múltiples acciones para, por ejemplo, generar alimentación animal propia a través de la yuca. Hay mucho terreno abandonado, ¿generar forraje propio podría ser una de las soluciones? 

La guerra de Ucrania disparó los costes y nosotros hemos hecho un esfuerzo importante de ayudas relacionadas con el tema de alimentación. De hecho tenemos un plan forrajero que va en esa línea para mejorar o disminuir la dependencia externa. También mantenemos otras medidas para apoyar a la ganadería como continuar con el coste cero al faenado en el Matadero para compensar esos costes, la cual hemos renovado este año. El sector lo requería.

Tenerife tiene un producto local con mucha calidad y se han hecho campañas para acercarlo al turista e incluso a los residentes. ¿Tienen retorno estas acciones? y en esta línea ¿se debería tener más vigilado el cumplimiento de conceptos de restauración típicos de la isla como los guachinches? 

Recibimos a millones de personas al año, además del mercado interior y de las Islas. El potencial está ahí, al igual que el contacto que mantenemos con las organizaciones hoteleras para potenciar el producto kilómetro 0 a través de eventos como Madrid Fusión o San Sebastián Gastronómica. La línea de trabajo se establece dentro del Plan Director de Gastronomía de Tenerife para unir esas sinergias. 

En el caso de los guachinches, aunque es una competencia regional, es cierto que actualmente es una figura difusa que debe tener certezas porque mejora la propia imagen del lugar y su trazabilidad. Tenemos que impulsar esa imagen, porque es un reto. Al final genera un referente de calidad y una realidad vinculada al territorio, ya sea por el queso o el vino. Hay que hacer una actualización de ese modelo. 

El relevo generacional no solo afecta a la agricultura y a la ganadería, también a la pesca tradicional. ¿Cómo se puede hacer un sector atractivo para los jóvenes?

El relevo generacional es un problema del sector primario en general. En el caso de la pesca artesanal nosotros hemos canalizado ese esfuerzo a través de una figura importante tradicionalmente como son las cofradías. En Tenerife existen 10 cofradías de pescadores, y este año hemos incrementado la partida a más de 300.000 euros para que el sector resulte atractivo invirtiendo y mejorando la calidad de las propias cofradías o los pantalanes. 

La apuesta debe ser continuada en el tiempo y las ayudas se han incrementado en este mandato siempre con un denominador común: que el propio sector participe en esa toma de decisiones. Los políticos tenemos que sentarnos y escuchar.