Ángel Víctor Torres, a lo largo de los últimos meses, ha repetido en varias ocasiones que su prioridad es dar continuidad al Pacto de las Flores al frente del Gobierno de Canarias —si los números dan, claro—. Para que eso suceda, la prinicipal incógnita está localizada a la izquierda del PSOE: en Unidas Sí Podemos, el socio más vituperado por alianzas mediáticas a lo largo de estos cuatro años y el más desgastado por sus divisiones internas.
Noemí Santana, consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud, repite como candidata a la presidencia de una coalición formada por Podemos, Izquierda Unida y Sí Se Puede, pero que llega al 28M debilitada por la pérdida de referentes como Alberto Rodríguez —ahora candidato al mismo cargo como cabeza de lista de Drago Verdes Canarias— o Javier Doreste —fuera de la política tras ocho años como concejal de Urbanismo en Las Palmas de Gran Canaria—.
No han sido cuatro años fáciles para Santana y su equipo en el Gobierno de Canarias, donde les tocó gestionar la llegada de menores durante la última crisis migratoria y su incapacidad inicial para revertir las listas de espera para el reconocimiento de la situación de de dependencia para miles de canarios —situación que mejoró tras la llegada de Marta Arocha (PSOE) a la dirección general—.
"Llegamos con muchísimas ganas e ilusión a esta campaña", admitió la noche del jueves Noemí Santana antes de recalcar que "vamos más unidas y más fuertes que nunca en esta confluencia con Izquierda Unida, con Podemos y Sí Se Puede, bajo el nombre de Unidas Sí Podemos".
La candidata apuntó que "nuestra experiencia de gobierno creo que es nuestra mayor garantía, nuestro mayor aval de cara a la ciudadanía y de cara a los votantes. Los hombres y mujeres de Unidas Sí Podemos vamos a defender con valentía las políticas transformadoras en las instituciones, porque allá donde otros ceden a chantajes y amenazas nosotras no lo vamos a hacer".
"Es importante que no debamos nada a nadie", indicó Noemí Santana como carta de presentación, "simplemente a la ciudadanía que nos vota. No le debemos un euro a los bancos, simplemente respondemos a aquellos que han creído en nosotras y en nuestro proyecto. Eso nos hace ser muy libres para hacer política para la gente".