El pacto de no agresión establecido dentro de Nueva Canarias (NC) para afrontar sin navajazos la campaña de las elecciones europeas saltó por los aires este lunes. No habían pasado ni 24 horas desde el cierre de las urnas cuando Teodoro Sosa, alcalde de Gáldar, vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria y uno de los referentes del sector crítico que pide un relevo en la estructura orgánica del partido canarista, aprovechó la dimisión de Yolanda Díaz al frente de Sumar para soltar una pulla a Román Rodríguez y a la cúpula de la formación.
"Me acabo de enterar de la dimisión de Yolanda Díaz por los malos resultados electorales de Sumar. Ojalá en todas las organizaciones cundiera el mismo ejemplo", escribió Sosa en su cuenta personal de Twitter/X. Al mensaje del alcalde de Gáldar, que en las últimas elecciones locales lideró la candidatura del BNR bajo el paraguas de Nueva Canarias, le siguieron en la misma línea otras publicaciones de regidores de ayuntamientos grancanarios que en los comicios del año pasado utilizaron la misma fórmula de alianzas locales con el partido canarista.
Agüimes
Óscar Hernández, alcalde de Agüimes por la mayoría absoluta que alcanzó la alianza entre Roque Aguayro y Nueva Canarias, compartió la publicación de Teodoro Sosa junto al siguiente mensaje: "Asumir la responsabilidad, dar un paso a un laldo para que el proyecto pueda avanzar, abrir el camino a la renovación, anteponer el interés colectivo por encima de cualquier personalismo... Inteligencia, generosidad, compromiso y honestidad. Sí, Teodoro Sosa, ojalá cumpla el ejemplo".
No es un asunto menor el recado que deja Hernández, que aparece en el horizonte canarista identificado como uno de los hombres de confianza de Antonio Morales —presidente del Cabildo grancanario, uno de los líderes cuyo discurso tiene más peso dentro de la sociedad de la Isla y que durante las últimas semanas sólo se dejó ver en el acto que marcó el inicio de la campaña de Nueva Canarias para las elecciones europeas—.
Valsequillo
A Sosa y Hernández también se les sumó Francisco Atta —regidor del Ayuntamiento de Valsequillo y líder de la Asamblea de Asociación de Barrios (ASBA) integrada en Nueva Canarias—. "Reacciones que marcar [sic] una forma de entender la política. No todos y todas lo hacen", afirmó en la misma red social al compartir la noticia relacionada con la decisión adoptada por Yolanda Díaz dentro de Sumar.
La crisis en Sumar, además, no es ajena a Nueva Canarias. Ambos partidos concurrieron en coalicón a estas elecciones europeas y sus resultados estuvieron muy por debajo de los que ambas formaciones lograron hace un año por separado. Un dato sustenta el relato de los que piden un cambio: el conjunto de votos que acumularon, en las generales del año pasado, alcanzó los 152.880 apoyos; la alianza que firmaron ambos organizaciones para estas europeas apenas superó los 27.000 sufragios.
Derrota en Gran Canaria
El caso de Gáldar es significativo. Teodoro Sosa, en las elecciones municipales de mayo del año pasado, fue el alcalde de España elegido con el mayor porcentaje de votos en un municipio de más de 20.000 habitantes. Logró el 78,84% de las 14.417 personas que votaron en Gáldar (25.000 habitantes) para disponer de 19 de los 21 concejales que componen la corporación municipal. Este domingo, sin embargo, la alianza formada por Nueva Canarias y Sumar sólo recibió el apoyo de 393 vecinos —menos que PSOE, Partido Popular Vox, Coalición Canarias y Alvise Pérez—.
En estos comicios europeos, por primera vez desde la creación de Nueva Canarias —en 2005—, Coalición Canaria ha logrado más votos en Gran Canaria que la formación presidida por Román Rodríguez. El partido nacionalista, que iba en alianza junto al PNV, llegó hasta los 15.790 sufragios y la organización canarista —junto a Sumar— se quedó en 13.336, números que liquidaron la condición de la Isla como feudo electoral de NC.
Ejecutiva
El desplome tampoco pilla por sorpresa a militantes de Nueva Canarias. En una Ejecutiva Nacional convocada para poner en marcha la maquinaria de este proceso electoral, las Ejecutivas Locales de Firgas y Gáldar ya anunciaron que no colaborarían con la campaña al estar en desacuerdo con la alianza firmada con Sumar. A ese boicot se sumaron Arucas y Agüimes y dentro de la dirección se sospecha que fue secundado en Valsequillo, Guía, Tejeda, Mogán y San Bartolomé de Tirajana.
El futuro de Nueva Canarias y, en buena medida del nacionalismo canario, se resolverá en los próximos meses. Queda por resolver si será un proceso ejemplar o Román Rodríguez acabará como Julio César en los Idus de marzo.