Decíamos ayer... como el famoso reinicio atribuido a Fray Luis de León. Pese a que es (de nuevo) presidente del Gobierno de Canarias desde hace ocho meses, este martes será un día especial para Fernando Clavijo. El Debate sobre el Estado de la Nacionalidad Canaria es el momento en el que los máximos regidores de los designios autonómicos exponen su labor de gobierno y las líneas básicas de su acción ejecutiva.
No fue ayer y por eso no es este el mismo escenario que se encontró el dirigente nacionalista cuando llegó por primera vez al poder en 2015. Canarias continua con una serie de problemas endógenos que cualquier ciudadano puede recitar como la mítica alineación de su equipo favorito.
Las listas de espera, ambulatorias o quirúrgicas, la cronificación del paro o los problemas en el acceso a una vivienda derivados, en parte, de la poca o casi nula construcción de vivienda pública. Esto ya lo tenía Clavijo sobre la mesa hace siete años y poca duda cabe de que estas cuestiones serán tratadas ampliamente por el presidente durante su intervención.
Será así porque la situación no ha mejorado. En este, nuestro paraíso de los grandes problemas, el contexto global, nacional, regional, ha depauperado lo que ya estaba mal y con ello las expectativas de un Archipiélago que afronta problemáticas de vital importancia para el devenir de las islas como la crisis migratoria o la tan ansiada diversificación económica.
Primeros frentes abiertos
Entre la amalgama de cuestiones a tratar por el Ejecutivo regional hay una serie de cuestiones sobre las que el gabinete coligado de Coalición Canaria y Partido Popular ha puesto el acento desde su llegada, en unas ocasiones por la necesidad de la actualidad y en otras para destacarse por encima del gobierno saliente.
En este último caso se incluirían las aulas públicas para la educación de 0 a 3 años prometidas. El Pacto de las flores liderado por el socialista Ángel Víctor Torres hizo de esta una de sus banderas y anunció que serían una realidad este curso académico y se llegaría a 10.000 en 2025, pero los retrasos en su adaptación o construcción llevaron a que se repartiesen plazas sin tenerlas preparadas.
Desde entonces la consejería liderada por Poli Suárez ha ido capeando el temporal inaugurando aulas aquí y allá para solventar una problemática heredada con la que el nuevo equipo entrante ha querido marcar distancias con el saliente.
Crisis migratoria
En el otro extremo, el apartado de la actualidad no se puede entender sin la crisis migratoria que asfixia al Archipiélago. Las cifras sobrecogen. Solo en enero y febrero llegaron 11.932 migrantes irregulares frente a los 1.865 que lo hicieron en el mismo periodo de 2023.
Se pueden enumerar muchos puntos de los acordados por CC y el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno español, pero solo uno estaba capitalizaba dicho pacto: el reparto justo de los migrantes arribados, con especial atención a los menores, para aliviar la carga poblacional que están sufriendo especialmente islas como El Hierro, Lanzarote o Gran Canaria.
Las acciones monclovitas impulsadas desde entonces se cuentan con una mano y demasiados dedos sin enseñar, lo cual se suma a la falta de compromiso a la hora de mantener una interlocución con el gobierno canario en lo que respecta a las relaciones con Marruecos -otro de los puntos acordados-, con el que además el Archipiélago mantiene disputas en otras materias como todo lo referente a las aguas territoriales (¿de Canarias?), como la pesca o la exploración de tierras raras.
Tal vez por eso Clavijo ha empezado a mover ficha. Primero, carta formal a Pedro Sánchez para decirle, básicamente, que qué hay de lo mío. Segundo, fotografía con Juan Manuel Moreno, su popular homólogo andaluz y regidor de la segunda comunidad más afectada por este fenómeno, para promover cambios legislativos que supongan un mejor reparto de los migrantes cuya tutela han de ejercer una vez llegan a sus costas.
Paro
Por más que haya problemas que adquieran mayor notoriedad por su exposición pública, lo cierto es que a los canarios lo que más le preocupa, no sin razón, es el paro. Hasta un 82% de la población lo siente así y los números le dan la razón.
En el último trimestre de 2023 la tasa de desempleo en el Archipiélago era del 16%, la juvenil era del 35,5% y lo que es aun más dramático, casi el 10% de los hogares tenía a todos sus miembros en paro según cifras del Instituto Nacional de Estadística recogidas por EpData.
Desde 2021, obviando las subidas trimestrales de comienzo de año, la tendencia ha sido descendente. El pasado mes de febrero se contabilizaron casi 170 mil parados con una mínima bajada del 0,05%. En cifras totales, unos dos mil desempleados menos que hace ocho meses, cuando Fernando Clavijo accedió a la presidencia del gobierno.
Entonces propuso, en el pleno del debate de investidura la firma de un pacto por el empleo en Canarias con el objetivo de reducir la tasa de paro y mejorar, “de la mano de los agentes sociales, la calidad y la estabilidad del empleo", pero de eso aun no sabemos nada.
Incumplimiento con el IGIC
En lo referente a lo económico la coalición CC-PP debe articular un discurso durante este debate que haga olvidar la promesa incumplida de la rebaja del IGIC, una bandera enarbolada durante la campaña que ambos partidos tuvieron a bien guardar en el cajón a las primeras de cambio.
Entre los motivos esgrimidos estaban unos inexistentes Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2024 y la necesidad de ajustarse al "gasto real" de lo que necesita la prestación de los servicios esenciales, cosa que "no sucedió” con el anterior ejecutivo, según la consejera de Hacienda Matilde Asián al presentar las cuentas para este año.
El contexto le será favorable en este sentido al dar un respiro la inflación que condicionó todo el 2023 y porque, en efecto, tres meses después de comenzar el año seguimos sin tener unos PGE para 2024.
La creación de empresas se cerró con una subida del 7,8% el pasado año aunque descendió tres puntos si se compara con el mes de julio, cuando llegó el nuevo gobierno. Enero, sin embargo, registró una subida interanual del 22% mientras que los concursos de acreedores descendieron el 9,5%.
Vivienda
Otro tema antiguo pero con un renovado frente abierto es el concerniente al acceso a la vivienda agravado por el auge del alquiler vacacional. Otro de los conflictos en los que el Ejecutivo regional ha querido poner el foco para acabar con esa “alegalidad”, según afirman diferentes consejeros del gobierno.
En ello trabajan para impulsar un nuevo marco legislativo que sustituya la ley que impulsó Paulino Rivero y que fue ampliamente corregida por el Tribunal Supremo en 2019.
El problema habitacional ha llevado a promulgar un decreto ley de medidas urgentes en materia de vivienda “para impulsar la disponibilidad de inmuebles, simplificar la gestión y hacer frente a la gran demanda de vivienda que existe en el Archipiélago”.
Una medida que sin duda tendrá su réplica este martes por parte de la oposición, que lo ve como un café para todos donde se llevará a cabo depredación urbanística.
Costas
En materia de costas también se ha enfrentado Canarias al gobierno de la nación, después de haber transferido unas competencias (cuando los colores de la camiseta eran los mismos) que, en la práctica, no se están cumpliendo.
Tras un par de casos “menores” se ha encontrado su culmen en el anuncio de Transición Ecológica de derrumbar el Riu Oliva Beach de Fuerteventura, algo que choca frontalmente con las competencias traspasadas y por ahí el Gobierno de Canarias tampoco quiere pasar.
Habría que preguntarle a la Plataforma de Afectados por la Ley de Costas que opinan de esta rápida intercesión del Ejecutivo.
Otros frentes
No son estos todos los frentes abiertos que tiene que enfrentar el equipo de Clavijo y Domínguez, pero quizás los que más en liza se encuentran. Nótese que se ha obviado a Koldo, a Ábalos y a las mascarillas porque si bien será carne de cañón para los momentos en los que el PSOE decida ir al ataque, no debería ser este el marco en el que se establezca un debate que ya tendrá su propio escenario.
Lo que queda por contar no es poca cosa. El drama de la sanidad canaria está tan enquistado y es tan perentorio que poca más literatura se le puede añadir. La lista de espera para una consulta en la sanidad pública es casi la misma que los parados que buscan empleo. En diciembre fueron 147.952 personas, el 2,2% mas que en junio, recién elegido el nuevo presidente.
El sector primario también merece un monográfico, y la polémica con respecto a la futura línea que conectará de nuevo Fuerteventura con Marruecos suma más ingredientes a un plato que ya está por desbordarse.
Del turismo se hablará, pero bien, o lo que es lo mismo, poco si no es para atribuirle los grandes males del Archipiélago, entre ellos la falta de diversificación económica de Canarias, un clásico. No faltará tampoco la sostenibilidad y la transición ecológica. Todo lo cual no será posible sin una planificación territorial acorde a un modelo de región, sea la que sea, que con paso firme se encamine hacía un futuro de prosperidad para todos sus habitantes.