Presidente de Canarias, ministro y alcalde de la ciudad que lo vio nacer. Jerónimo Saavedra fue, es y será siempre uno de los políticos más relevantes que ha dado el Archipiélago. Su muerte a los 87 años ha conmocionado a las Islas y a todo el que lo conoció. Un buen ejemplo son los masones por la estrecha relación que mantuvo con ellos a lo largo de su vida. Hasta el punto de que en 2022 la Gran Logia de España le otorgó la Medalla de Oro.
Es complicado explicar qué es la masonería, pero para entenderla hay que desprenderse de prejuicios porque ni mucho menos merece cargar con las connotaciones negativas que se le dio durante un oscuro periodo como la dictadura franquista. José Luis Batista, gran maestro provincial de los masones canarios, lo explicó hace unos meses en declaraciones a Atlántico Hoy.
Abora 87
“Es una de las más antiguas fraternidades que tienen como fundamento la creencia en un ser supremo, expresado bajo el nombre de Gran arquitecto del universo”, dijo. “No se trata ni de una religión ni de una ONG, se funda en la razón y exige a todos sus miembros el respeto a las creencias ajenas”, detalló también.
Saavedra nunca dudó en expresar públicamente que era masón y formaba parte de Abora 87, una logia ubicada en La Palma. Este periódico se ha puesto en contacto con un miembro del mismo grupo para dialogar sobre qué les supuso la figura del expresidente y su vinculación con la hermandad.
"Es un referente"
“Se nos ha ido el hermano mayor”, afirma. Es difícil, y al mismo tiempo habla muy bien del político canario, encontrar a alguien que tuviera una relación con él en vida y que no recuerde su talante. “Jerónimo es esa figura capaz de unir a cualquier colectivo o persona independientemente de su signo político”, sentencia. “Es un referente, ha sido todo en Canarias. Es una persona de la que nadie puede decir algo negativo”, agrega.
Expresa que Saavedra tiene una relevancia que va más allá de lo político. “Es una persona que en su trabajo diario, en lo público y en lo privado, ha llevado al extremo la definición de masón”, subraya. Se refiere a que siempre llevó por bandera los conceptos de libertad, igualdad y fraternidad porque “escuchar a los hermanos y sentar cátedra en sus intervenciones hace que quienes lo rodean también tengan su crecimiento personal”.
Una huella imborrable
La persona entrevistada por este medio resalta el trabajo del exalcalde de Las Palmas de Gran Canaria para luchar por los derechos sociales de los distintos colectivos y protegerlos. Si algo queda claro es que, aunque ya se haya ido, Saavedra deja una huella imborrable.
“No podemos olvidar que no solo en su condición de político reconocido salió para declarar que era homosexual, sino que también lo hizo para avanzar en los derechos de los masones, siendo de los primeros que públicamente que reconoció serlo”, expresa.
"Ha marcado un camino"
“Desde siempre ha sido”, atestigua, “un referente para la masonería de toda España”. “No podemos olvidar que recientemente recibió el mayor reconocimiento que se le puede otorgar a un masón en España”, manifiesta. En realidad, más que compañeros eran familia porque “cualquiera de los miembros de nuestra orden es nuestro hermano con todas las consecuencias”.
Sostiene que Saavedra, como persona referente de la sociedad canaria, siempre hizo valer los principios de la masonería. “Nos ha apoyado a todos, es una figura incuestionable en nuestra sociedad. Ha marcado un camino que debemos seguir ahora más que nunca”, culmina.