El consejero de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas, Manuel Miranda, ha llamado a "trabajar desde ya" en la elaboración de los próximos planes hidrológicos, los correspondientes al cuarto ciclo 2028-2033 para evitar "la presión y las suspicacias" de Europa y de Madrid.
El objetivo, ha señalado el consejero en comisión parlamentaria, es que no vuelva a ocurrir que cuando el Gobierno de Canarias va a negociar con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, "lo primero" que le espetan es que "somos unos incumplidores".
Se refiere a que aún hay una isla, La Palma, que no tiene aprobado su plan hidrológico, además de que falta por sacar adelante el plan de gestión de riesgo de inundaciones.
Siete demarcaciones hidrográficas
La idea es que en el cuarto ciclo del agua no suceda que cada una de las siete demarcaciones hidrográficas vayan a diferentes ritmos en la aprobación de sus respectivos planes, y llegar al 31 de diciembre de 2027 con todos aprobados, pero para eso, ha subrayado, "hay que empezar a trabajar ya".
Manuel Miranda ha indicado que Canarias viene de "una época de retraso, sin señalar a nadie, lo que conlleva falta de una planificación", en la que "se marcan objetivos y medidas que contrarrestan las carencias del sistema. Y esto no puede pasar", ha reflexionado.
Ha insistido en la importancia de "dejar atrás esa presión" de la UE que "nos condiciona nuestra estrategia y la seguridad jurídica de los planes".
"Lo primero que ha hecho" el Gobierno de Canarias, ha explicado el consejero a preguntas del diputado de la Agrupación Socialista Gomera Jesús Ramos, es trabajar por la coordinación, y con tal propósito ya se ha reunido la comisión permanente del agua y se ha fijado un cronograma.
El ejecutivo regional, a través de Tragsa, brindará ayuda a los cabildos y consejos insulares en la elaboración de los planes.
"Presión" sobre Canarias
En la comisión parlamentaria, Manuel Miranda se ha referido en varias ocasiones a esa "presión" sobre Canarias, en especial por el incumplimiento de la directiva europea sobre el tratamiento de aguas residuales en 39 puntos, por las que Europa "tiene en el punto de mira" al archipiélago.
Ha asegurado que el ejecutivo canario está trabajando en diferentes proyectos, en El Cotillo, Yaiza, Playa Blanca, Tamaimo, Chío, Alajeró... para tratar de "evitar las sanciones europeas, que están ahí", de la mano del Gobierno de España y con el recursos de los fondos europeos Next Generation.
Sobre la situación de El Cotillo, en Fuerteventura, ha detallado a instancias de la diputada del grupo Nacionalista Natalia Évora que se ha encargado a Tragsa la redacción de un nuevo proyecto para completar la red de saneamiento, aprobó un gasto plurianual para las obras y firmó un convenio con el Ayuntamiento de La Oliva.
Actuaciones
Las obras consistirán en la instalación de tuberías para la conexión de las casas a la red, el desplazamiento de la estación de bombeo y la construcción de un tanque de tormentas que asuma el caudal de aguas negras en episodios de fuertes lluvias. La previsión es que puedan comenzar las obras a principios de 2025.
En cuanto a los problemas de saneamiento en El Paso, La Palma, por los que le ha preguntado la diputada nacionalista Diana Lorenzo, ha explicado que queda pendiente la zona del Barrial, donde no existe red de fecales y casi todas las casas vierten a pozos negros, lo que supone un riesgo de contaminación de los acuíferos.
Ha advertido de la dificultad de las obras en esta zona por su "orografía compleja", y que se extenderán por un periodo de tres años.