Ángeles Lorenzo-Cáceres, magistrada titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Santa Cruz de Tenerife que instruye el caso Mediador, ha citado como testigos a Adelaida P.S. –conocida en la trama como chocho volador, mote que empleaban el general de la Guardia Civil Francisco Javier Espinosa (con el que mantenía una relación sentimental) y Marco Antonio Navarro (cerebro de la red presuntamente corrupta) para referirse a ella– y a Luis Monzón –piloto de rallies, empresario y que formaba parte del chat denominado Equipo A junto al propio alto mando de la Benemérita, Miguel Ángel Ramírez (presidente de la UD Las Palmas y vinculado familiarmente, según la Policía, a chocho volador) y Eustasio López (propietario de Lopesan)–.
Los dos deberán comparecer, según apunta el diario ABC, el 31 de marzo en el juzgado de la capital tinerfeña.
Roles secundarios
El chocho volador, amante del exgeneral de la Guardia Civil, aparece en la investigación porque Espinosa pedía a los empresarios estafados por la trama que la contrataran por 3.000 euros al mes como comercial. Para devolverles el favor, el Papá –como se conocía al militar entre los miembros de la red– les ofrecía, entre otras oportunidades, la ventajosa oportunidad de invertir en la instalación de placas solares en Mozambique y Cabo Verde en un negocio valorado en unos 35 millones de euros.
El presidente de la UD Las Palmas, al que no se hace ningún reproche en esta causa judicial, ha reconocido que recibió una oferta para instalar paneles solares de una empresa vinculada a uno de los imputados, Antonio Bautista, pero que finalmente la desestimó, porque le aconsejaron decantarse por otro fabricante.
Placas a Lopesan
Monzón, campeón de España de rallies en 2001, ha sido citado tras aparecer en mensajes y grabaciones de Marco Antonio Navarro, así como en mensajes del general Espinosa por su relación comercial con el Grupo Lopesan.
De nuevo, en los informes policiales de la causa se indica que la trama no tuvo éxito en las gestiones con Lopesan, que no consideró oportuno adquirir las placas solares de la empresa de Antonio Bautista que le ofrecían con la mediación del general Espinosa.