El Ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha afeado a la diputada de Coalición Canaria (CC) Ana Oramas que critique el "fracaso" del ingreso mínimo vital (IMV) cuando la renta mínima autonómica en vigor mientras gobernaba CC llegó a muchos menos ciudadanos. "Después de 25 años, llegaron a menos de 20.000 personas", ha asegurado Escrivá en la sesión de control al Gobierno en el Congreso, donde ha destacado que el IMV "ha llegado a más de 100.000 personas" en Canarias en un año y medio gracias a haber "doblado el presupuesto" dedicado por el ejecutivo autonómico a este tipo de ayudas no contributivas.
Escrivá ha criticado que el gobierno insular cuando estaba en manos de Coalición Canaria no gastó más de 42 millones de euros anuales en rentas mínimas, a pesar de que en el año 2018 tuvo un superávit de 900 millones de euros.
"¿Y viene usted a decirme esto aquí? ¡Venga, por favor!", le ha espetado el ministro, visiblemente enfadado, al tiempo que ha recordado que hasta que se puso en marcha el IMV las rentas mínimas han sido competencia exclusiva de las autonomías.
Brecha digital
Oramas, por su parte, ha calificado la gestión del IMV de "fracaso" por no haber llegado "a cientos de miles de personas que reunían los requisitos", lo que considera una "situación inaceptable". La diputada canaria ha afirmado que la brecha digital es un impedimento para que muchas personas accedan a la solicitud del IMV y también ha criticado el funcionamiento de las oficinas de la Seguridad Social, en las que, ha afirmado, los trabajadores quieren atender a los demandantes pero "no les dejan".
A su juicio, la gestión es deficiente porque el Gobierno no llegó a acuerdos con los ayuntamientos ni quiso ceder la gestión del IMV a las Comunidades Autónomas para poder así "apuntarse el tanto político"