Por situarnos. En 2015, el Ayuntamiento de Telde acumulaba una deuda de 170 millones de euros y estaba intervenido por Hacienda. Hoy, ocho años después, el consistorio grancanario está saneado. Entre una fecha y otra, Carmen Hernández (Nueva Canarias) ha presidido el gobierno municipal durante seis años –todos los correspondientes a dos mandatos excepto dos, los ejercicios en los que Héctor Suárez (Coalición Canaria) tuvo el bastón de mando en virtud del pacto electoral que alcanzaron las dos formaciones tras las elecciones locales de 2019–.
El 28 de mayo, Hernández optará en las urnas a un tercer mandato y figurará como número uno en la lista del partido canarista al Parlamento regional por la circunscripción de Gran Canaria. Su agenda nos da un tiempo muy limitado, pero la alcaldesa apura los minutos para exponer los logros de su trabajo al frente de la administración, mostrar orgullo por reducir la deuda a cero y lanzar varios sopapos a algunas de las candidaturas de la oposición. El Partido Popular de Sergio Ramos y Ciuca son los objetivos de sus pullas.
[Pregunta] Es evidente que, pase lo que pase el 28 de mayo, el Ayuntamiento de Telde estará en una situación mejor que la que usted se encontró en 2015, cuando asumió el cargo de alcaldesa. Liquidada la deuda que había provocada la intervención de las cuentas del consistorio y después de poner orden en la casa, no sé si se queda con la magua de no haber hecho más por los vecinos del municipio. Más, me refiero, de manera directa, en dotar de más servicios, en mejorar su día a día y no tanto en resolver los problemas financieros de una administración pública.
[Respuesta] El cambio de Telde es innegable. Negar eso es negar una evidencia científica. Los datos son incuestionables. Cogimos un ayuntamiento arruinado, en el pozo económico, con una deuda que era la mayor de Canarias y la cuarta de España y, desde 2020, Telde está saneado. Deuda cero. Telde es hoy un municipio sin deuda. Y me consta que eso los ciudadanos lo valoran. Y la prueba fue que en las elecciones de 2019 ganamos votos y concejales. Esta segunda parte del mandato, estos cuatro años en los que yo he sido alcaldesa sólo dos, que depende de para quién se olvida, hemos podido hacer cosas importantes desde 2020 que yo sé que la ciudadanía valora.
¿Por ejemplo?
Por ejemplo rehabilitar y reabrir las tres escuelas infantiles municipales o por ejemplo rehabilitar más de 1.700 viviendas en Jinámar, con lo que eso supone para la gente y para la economía porque la construcción es un sector que genera empleo intensivo. Hemos podido abrir, por ejemplo, el primer centro de la historia para las personas sin hogar de Telde. O hemos podido acabar edificios tan importantes como este en el que estamos, El Cubillo, el nuevo ayuntamiento, una sede administrativa del siglo XXI. Hemos sido, por ejemplo, de los pocos municipios que impulsamos en Canarias la administración electrónica 100%, algo que nos ayudó mucho en la pandemia porque para nosotros fue muy fácil incorporarnos a una administración digital. Y, por ejemplo, también hemos hecho cosas tan importantes como una nueva ordenanza de servicios sociales, con la que hemos logrado que hoy en Telde no haya colas como las que yo me encontré en 2015 de personas a las que se les cortaba el agua o la luz. Hemos arreglado 35 parques infantiles, hemos rehabilitado todos los colegios de Telde, hemos podido, por ejemplo, ampliar la carretera de Melenara, que llevaba 30 años siendo demandada por la ciudadanía. Podría estar aquí durante una hora exponiendo hechos y logros de este gobierno, pero ¿esto significa que yo estoy satisfecha?
¿Lo está?
No. Primero, porque las ciudades nunca están acabadas. En todas, por modernas y por ricas que sean, siempre te vas a encontrar un trozo de acera rota o un colchón en una esquina de un contenedores. Eso lo he visto yo en Bruselas, Madrid o Palma de Mallorca. Lo digo porque algunos hacen campaña con las papeleras, demostrando la poca altura política y el poco proyecto que tienen para Telde. Pero efectivamente yo soy una persona autoexigente y además, como teldense, como canaria, quiero siempre más y mejor. Por eso creo que Telde se tiene que volver colocar en el lugar que le corresponde por acción y por historia. Y ahí es muy importante seguir trabajando.
¿Cómo?
Primero para mejorar los servicios públicos. Hemos podido avanzar, pero yo no estoy satisfecha. Me gustaría tener aún mejores servicios públicos. Tengo que recordar que los servicios públicos fueron recortados y diezmados por los gobiernos formados por el Partido Popular y por Ciuca para poder pagar la deuda, para poder pagar al Estado los créditos ICO. Me encontré más de 170 millones de euros de deuda: 110 a la banca, 35 a los juzgados, diez a proveedores e intereses. Y hemos pagado todo. Todo a la banca, todo a los juzgados, todo a los proveedores y además hemos pagado los intereses a los expropiados. Esto me ha generado la felicitación en sede judicial y en la calle los afectados nos reconocen el esfuerzo. Pero le decía que mejorar los servicios públicos para mí es un reto del siguiente mandato. Hemos mejorado alguna cosa estos años, pero hay que mejorar mucho más.
Cuénteme.
Por ejemplo, el contrato de Parques y Jardines, que lo recortaron echando a la calle a decenas de trabajadores. Hicieron un ERTE y lo hemos corregido. Además, hemos mejorado el contrato y ahora sacamos, con contratación, a concurso un nuevo contrato con más dinero y por tanto con más medios humanos y materiales para mejorar los parques y los jardines de la ciudad, algo que fue una seña de identidad de Telde. ¿Cómo podemos reforzar un contrato de parques y jardines con más dinero? Pues gracias a haber pagado el plan de ajustes, a haber pagado la deuda. Si no hubiéramos hecho ese trabajo no nos lo permitiría la ley y tampoco tendríamos liquidez para hacerlo. También estamos trabajando en una mejora del contrato de limpieza, que en este momento está siendo fiscalizado por la intervención. Si todo va bien, en breve tendremos más contenedores renovados, más personal y maquinaria aún más moderna en la calle. Seguir asfaltando nuestra ciudad es una de las grandes peticiones de la ciudadanía. Hemos podido asfaltar más de 200 calles, pero tenemos un plan para pavimentar otras 250. ¿Son todas? No, pero es que Telde tiene 102 kilómetros cuadrados y 74 barrios que estuvieron durante más de una década sin mantenimiento. En ocho años ninguna casa que esté destruida y con una deuda gigante se pone maravillosa, preciosa, con cojines de colores, centros de flores y sin deuda. Y esto cualquier economía doméstica, cuando se lo explico a los vecinos, lo entiende. Por eso creemos que la ciudad no puede parar. Estamos despegando y es muy importante mantener esta dinámica. No debemos retroceder. Estoy preocupada porque la ciudad puede retroceder si vuelve a ser gobernada por los que generaron este desastre. Porque lamentablemente lo que tenemos enfrente es lo mismo que hundió a esta ciudad.
Telde se ha convertido en los últimos años en un municipio dormitorio para mucha gente. En ese proceso, ¿cree que ha podido perder parte de su identidad?
Telde tiene una identidad muy muy profunda. No olvidemos que fue la primera ciudad fundada en Canarias y fue la primera sede episcopal. Junto con Gáldar es la ciudad con un origen prehispánico más importante. Esas señas de identidad están aquí, están presentes. Pero hay una realidad que nos convierte en un municipio atractivo: estamos al lado del Puerto de Las Palmas; al lado de Las Palmas de Gran Canaria; al lado del aeropuerto de Gran Canaria; la principal arteria que comunica la Isla, desde la capital hasta la zona turística, pasa por nuestra ciudad; y si no tenemos los parques empresariales más potentes de la Isla sí de los más potentes, con las grandes multinacionales asentadas en nuestro municipio. Históricamente ha sido una ciudad muy comercial. Esto nos convierte en un municipio atractivo. Tenemos una costa maravillosa. Tenemos cuatro banderas azules. Hoy, un grancanario que quiera vivir cerca de donde se mueve todo, sólo puede elegir entre Las Palmas y Telde. Y la calidad de vida es mayor en Telde que en Las Palmas. Y me va a perdonar el alcalde de Las Palmas, pero es la realidad. Ellos no tienen cuatro banderas azules ni una costa maravillosa. Las Palmas, además, está colapsada y Telde sigue teniendo terreno donde se puede construir. Efectivamente nos estamos convirtiendo en una ciudad donde la gente de Las Palmas se viene a vivir. Pero no lo veo como un problema, lo veo como una oportunidad. Para trabajar la identidad existen muchas formas.
¿Una pasa por recuperar el orgullo de ser de Telde? Lo digo porque durante años el nombre del municipio sólo destacaba por noticias negativas.
Lo que ocurría antes el Telde no era para estar orgulloso. Me he empeñado mucho, he hecho un esfuerzo personal y político, para evitar los titulares en negativo de nuestra ciudad. A veces me he callado cosas que me podían haber convenido desde el punto de vista político partidario porque creía que, en mi condición de alcaldesa, podía lesionar la imagen de la ciudad. Por eso, cuando algunos vienen de Madrid, que no sabemos quienes son, a hablar de Telde, a poner fotos de papeleras, digo que no hay derecho. Los teldenses llevamos de más de 700 años de historia, castellana y milenaria, hacemos cada día un esfuerzo personal y colectivo para sentirnos orgullosos. Fue el gobierno PP-Ciuca el que nos metió en la peor etapa y nos conocieron en la Penínusula por la corrupción y las malas prácticas polítcas. Pero eso se acabó, pasó a la historia. Nuestra ciudad tiene elementos para sentirse muy muy orgullosa. Yo, en un ranking de cosas negativas y cosas positivas de nuestra ciudad, le aseguro que gana el de las cosas positivas de la ciudad. Y no me refiero a la gestión municipal.
¿A qué se refiere?
En Telde todos los días pasan cosas muy buenas que nos convierten en un municipio ejemplar en la Isla. Un ejemplo. Reto a los que vienen de fuera a que vayan por Jinámar y que encuentren otro barrio vulnerable, donde vivan 15.000 personas vulnerables, con una elevada de tasa de paro, con un elevado indicador de pobreza, donde haya mejor calidad de vida que en el barrio de Jinámar. Le aseguro que no existe en el Estado, porque los conozco todos, porque dentro de mis tareas he sido concejala de Vivienda hasta hace poco, me he ido fuera para ver cómo se rehabilita en España y cómo se trabaja con los barrios vulnerables. Bueno, pues Jinámar acaba de ganar un premio estatal y de esto no habla la oposición. Lo bueno no le interesa. No le interesa que hoy Telde, Jinámar, haya ganado un premio a nivel nacional a la mejor rehabilitación integral. Es decir, es el barrio, de todos los vulnerables de toda España, que mejor se ha rehabilitado y que más ha cambiado elementos de calidad de vida y de cohesión social. O lo que le comentaba antes de las escuelas infantiles. Yo no conozco en España ningún municipio que en poco tiempo haya rehabilitado y abierto tres escuelas infantiles de un tiro, no progresivamente, de un tiro. Tres escuelas, 400 niños, educación infantil de cero a tres años gratuita. Le he mencionado algunos de los ejemplos por los que yo creo que hay razones para sentirse orgulloso de Telde y por lo que yo estoy convencida de que hemos hecho un trabajo respetable, que la ciudadanía valora y que estoy convencida que va a seguir valorando. Eso no quita que soy consciente, porque pateo la calle, porque vivo en Telde, que queda mucho trabajo por hacer. Y en esa tarea de seguir mejorando nuestra ciudad estamos.
La movilidad es uno de los grandes retos de Gran Canaria a corto plazo. Lo comentó usted antes, la arteria principal de la Isla, la GC-1, cruza su municipio. Y para llegar hoy [la entrevista se realizó el lunes pasado] hemos tenido que superar grandes retenciones debido a tres accidentes de tráfico. El volumen de vehículos empieza a ser inasumible y el Cabildo apuesta por el tren como alternativa, alternativa que pasará por Telde. ¿Cómo analiza esta realidad y sus posibles soluciones?
Nosotros, cuando se habla de la GC-1, me gustaría recalcar que somos unos grandes sufridores y muchas veces, de manera injusta, se nos imputa lo que pase en esa vía. Es como que pase una carretera por su casa y encima le echen la culpa. Sufrimos esa arteria y , obviamente, nos beneciamos de ella. Si estamos bien comunicados, en parte, se lo debemos a la GC-1. Ahora bien, creo que lo primero que necesitamos es un plan de movilidad insular. Nosotros estamos haciendo el nuestro, el de Telde, pero es prioritario un plan que estudie los diferentes modelos de movilidad que debemos impulsar, porque al final la movilidad que funciona es multimodal. No es cuestión de presentar la disyuntiva, ¿el tren o el coche? ¿El coche o el transporte público? Lo que tenemos que tener son muchas fórmulas de movilidad para bajar el uso del coche, que efectivamente está absolutamente disparado. Tenemos una ratio de coches por habitante que es la mayor de España. El tren, de hecho, creo que debe ser el camino, más que ampliar carreteras. El Gobierno tiene en su hoja de ruta la famosa Tangencial y yo, si tuviera que elegir entre los dos proyectos, me quedaría con el tren.
¿Por qué?
Primero porque es mucho menos invasivo contra el territorio. La Tangencial va a destrozar nuestro municipio de manera importante y a otros territorios de la Isla y lo único que va a hacer es a aportar son más carreteras y más coches. Lo que necesitamos es un buen transporte público, que sea muy económico, prácticamente gratuito. La experiencia nos dice que cada vez que mejora el transporte público, frecuencias y precio, se llena. Eso lo tiene la Autoriudad Única del Transporte totalmente medido. Además, hay que diversificar las modalidades del transporte. Y en ese apartado el tren ha demostrado en el mundo ser una vía útil. Yo, cuando me encuentro con detractores del tren, pues no lo entiendo. Aportan, como argumento, lo que va a costar mantenerlo, pero, ¿y lo qué cuesta mantener una carretera? ¿Y lo que contaminan los coches? Es que además ya es insostenible. No hay ningún elemento para estar en contra. Dicho esto, mientras llegua el tren hay que hacer otras cosas.
¿Cuáles?
El Cabildo apuesta por el tren, que es un proyecto ambicioso pero que va a tardar años, pero a la espera de que se ponga en marcha vamos a tener que experimentar. Yo creo que el Cabildo, el área de transporte, en esto ha sido demasiado conservadora. Habrá que probar otras alternativas, como por ejemplo el carril VAO. No pasa nada, vamos a experimentar. Le llaman la movilidad táctica. Es decir, poner en marcha mecanismos que se puedan quitar. Lo probamos. ¿Que funciona? Lo dejamos. ¿Que no funciona? Lo quitamos. Lo que no podemos es esperar hasta que se materialice el tren porque va a tardar unos años. Yo creo que el gran reto del siguiente mandato es apostar por la movilidad sostenible y por alternativas que hay muy interesantes. ¿Sabe que tenemos un proyecto muy atractivo, que hemos ejecutado con el Gobierno de Canarias que comunica Los Arenales, en la parte alta del Barranco de los Cernícalos, con Bocabarranco? Es lo que llamamos nuestro Corredor Paisajístico. Pero el verdadero proyecto pasa por comunicar luego Bocabarranco con la escultura de Lady Harimaguada, ya en Las Palmas de Gran Canaria. La gente de Telde podría ir a trabajar a Las Palmas en una bicicleta eléctrica y plantarse en 15 minutos. Se ahorrarán humo, gasolina, atascos, estrés...
¿Cuándo se podrá ejecutar y poner en marcha ese corredor?
Hay que salvar ahí un problemilla, que se genera en la zona donde está Unelco y donde está la central, pero técnicamente hay un proyecto ya redactado que se puede salvar. Eso será un gran carril bici. El proyecto ya está redactado y puede ser una realidad en dos años si ponemos los recursos. Además, Europa este tipo de proyectos los financia. Por tanto, tenemos que ponernos las pilas en este tema y además hay que hacerlo, aunque yo aquí tengo una obsesión que es un reto de todas las administraciones españolas.
¿Qué obsesión?
Tenemos que simplificar la administración, tanto la española como la canaria, que al final es la misma. No sirven para los retos de este siglo, es una administración del siglo XIX, pensada con una visión administrativista rigorista donde se ha confundido el rigor y la seguridad jurídica con el obstruccionismo y con una cultura administrativa de olvidar que detrás de cada papel hay un proyecto de vida, hay una persona, hay un proyecto económico. Tenemos que humanizar la administración. No puede ser que veamos papeles. No, esto no son papeles. Yo, que soy docente, los funcionarios del mundo eductivo, lons funcionarios del mundo sanitario, enfrente tenemos personas, no lo puedes dejar para mañana. Está ahí la persona. El funcionario de la administración, lo que tiene enfrente, son papeles, y es fácil pensar que los papeles pueden esperar, pero es que detrás de ese papel siempre hay una persona con un mayor o menor nivel de urgencia y necesitamos humanizar la administración y simplificarla. Y se puede. Se puede. Siempre lo digo. Merkel creó un ministerio de la desburocratización de la administración alemana y lo consiguió. Yo tenía la esperanza de que España, el Estado, cambiara las leyes con los fondos europeos. Yo he hecho alguna experiencia en mi pequeñita parcela y hemos conseguido grandes logros. Por ejemplo cosas tan simples como hacer protocolos. Un expediente tiene un procedimiento que se protocolariza y todo el mundo sabe los pasos, de manera que cuando el expediente cae en la mesa de un funcionario ese funcionario sabe el procedimiento, no innova. La administración para el ciudadano se ha convertido en una verdadera pesadilla. Esa administración que está para servirte parece que se convierte en tu enemigo y eso es terrible.
Terminemos esta entrevista por lo más reciente: Dreamland, el proyecto audiovisual que Newport y Lopesán quieren desarrollar en el municipio.
Nosotros estamos ilusionados con proyectos que van a generar economía y empleo en Telde. Uno que ya es una realidad, con un proyecto que ya está redactado y en fase de licitación, es el edificio de servicios esenciales, que se va a ubicar en Jinámar. Es un edificio del Gobierno de Canarias que va a generar economía y sinergia en la zona. Que quinientos y pico trabajadores lleguen todos los días a ese edificio, de manera intermitente o puntual, va a generar economía y empleo en el entorno. Nuestra ciudad se va a ver beneficiada. Y el proyecto de Dreamland, por supuesto, que todavía es una cuestión que tiene recorrido para materializarse y que va a depender siempre de la voluntad última de los inversores, pero todo apunta, porque ya han presentado el proyecto en el Cabildo, que están interesados de verdad en asentarse en Gran Canaria y en concreto en Telde, donde el Grupo Lopesan tiene una parcela muy muy importante donde se ubicaría este proyecto. Nosotros estamos encantados. A mí el sector audiovisual, junto al de la sostenibilidad de las energías renovables, sinceramente me parece de los más atractivos para diversificar nuestra economía. Creo que es como cuadrar el círculo, porque es una economía atractiva, de cultura, de fomento de la cultura, una economía que no contamina y una economía que genera un empleo de calidad, cualificado. Va a ser una oportunidad maravillosa para nuestra gente joven, a la que por cierto le encanta el mundo audiovisual. Muchísimos jóvenes estudian o quieren estudiar aspectos del mundo audiovisual desde una FP hasta una titulación universitaria. Así que estamos encantados y esperamos que se materialice. Nosotros vamos a poner de nuestra parte, vamos a remover todos los obstáculos, si los hubiera, para que este proyecto sea una realidad.