El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha advertido que, si no hay una respuesta del Gobierno de España, la administración canaria instalará más carpas de emergencia en los puertos de las islas para atender la llegada masiva de migrantes.
La medida responde a la falta de infraestructura adecuada para ofrecer una acogida digna y segura a las personas que arriban al Archipiélago en embarcaciones precarias. Clavijo calificó estas carpas como "una representación del fracaso de la política migratoria", señalando la "incapacidad" del Estado para gestionar adecuadamente la situación.
Única alternativa
El presidente señaló que esta infraestructura provisional se ha convertido en la única alternativa a la falta de recursos del Gobierno central y apuntó que la instalación de una carpa en Lanzarote fue solicitada por el propio Estado, a pesar de las críticas de la oposición. “Si no hay respuestas, va a haber más carpas. No hay más remedio y benditas carpas”, afirmó Clavijo.
Además, defendió la necesidad de que se establezca un mecanismo obligatorio de derivación de menores no acompañados hacia otras comunidades autónomas, lo que requeriría una modificación de la Ley de Extranjería.
En este sentido, destacó la importancia de “no romper relaciones” en las negociaciones y enfatizó su compromiso con la “lealtad institucional”, que considera fundamental para abordar el fenómeno migratorio de manera conjunta y efectiva.
Apoyo europeo
Por otra parte, aseguró que la Unión Europea ha demostrado su apoyo, pero el Gobierno español y la clase política nacional han fallado a Canarias al no canalizar los recursos necesarios.
Clavijo criticó que los fondos europeos han sido destinados únicamente a la atención de migrantes adultos, dejando a los menores sin el apoyo adecuado. Canarias enfrenta una situación límite con más de 2.000 menores extranjeros no acompañados que no pueden ser escolarizados por la falta de empadronamiento y otros obstáculos administrativos.