El presidente del Cabildo de La Gomera y líder de la Agrupación Socialista Gomera (ASG), Casimiro Curbelo, ha vuelto a verse envuelto en una polémica tras una denuncia por una supuesta agresión perpetrada por su hijo Aday a la salida de un conocido bar-karaoke en la avenida Francisco La Roche de Santa Cruz.
Al salir del citado local a altas horas de la madrugada, Miquel Q., el presunto agredido y denunciante de los hechos, le realizó varias preguntas mientras grababa un vídeo. Curbelo, en evidente estado de embriaguez, en principio se mostró solicito pero ante el cariz de las cuestiones intentó finalizar la conversación.
En ese momento acaba la grabación, justo antes de que se produjese la supuesta agresión por parte del hijo de Curbelo. Miquel Q. denunció los hechos ante la policía aportando un parte de lesiones en el que se habla de una "herida superficial en comisura de labio izquierdo, enrojecimientos y aumentos de volumen en pómulo, cuello y rodillas".
El incidente de la sauna
No es esta la primera vez que Curbelo y su hijo se ven envueltos en una polémica nocturna. Allá por el año 2011, en una sauna madrileña, ambos, en compañía de un amigo, fueron protagonistas de un altercado que derivó en su expulsión del local por comportamiento inadecuado.
Más tarde fueron detenidos y trasladados a la comisaría de la madrileña calle Tetuán, donde fueron denunciados por la Policía Nacional por agresión a un agente.
En aquel momento Curbelo, además de presidente del Cabildo de La Gomera, era senador por el PSOE, y este hecho provocó su salida del partido y la creación de la Agrupación Socialista Gomera con la que ha concurrido en las últimas citas electorales con un inmenso apoyo de la ciudadanía de su isla.
‘Virrey’ de La Gomera
Durante gran parte de sus años de actividad política, Curbelo ha sido conocido como el ‘virrey o el ‘conde’ de La Gomera por el enorme apoyo popular de los suyos y su manera de manejar la política isleña.
Dicen que no tiene horarios, que habla con todo aquel que lo necesite y que arregla los problemas de todos. En La Gomera son gratuitos los entierros (con corona de flores incluida), los estudios están fuertemente subvencionados, igual que elementos como las gafas o las prótesis dentales.
Todo ello desde 1991, año en el que comenzó su mandato ininterrumpido de 31 años al frente del cabildo insular, primero con el PSOE y después con la ASG, puesto que ha compaginado con cargos como el de senador o de diputado autonómico en el Parlamento de Canarias.
Pacto de las flores
El abrumador apoyo popular del que goza le ha granjeado una importante posición de poder en la política regional. Con cerca del 60% de los sufragios en las últimas elecciones, sus tres diputados le daban la llave para elegir el color del gobierno autonómico.
Dotado de un indudable olfato político, pronto vio que la opción de un ejecutivo de Coalición Canaria apoyado por la derecha no tenía visos de fructificar, y pese a su buena relación con Fernando Clavijo, líder de los nacionalistas, finalmente se decidió por el pacto “de progreso” junto a PSOE, Nueva Canarias y Unidas Podemos.
Una opción por la que se decidió tras recibir llamadas de los líderes socialistas que nada hicieron por él cuando el incidente de la sauna en 2011, y que le reportó ingentes beneficios para La Gomera además del control de la potente Consejería de Turismo, de la empresa pública Gesplan, que asesora en planeamiento urbanístico, y de Puertos Canarios.
Bomba al volcán
Además de los altercados ya mencionados junto a su hijo, hace pocos meses, cuando estalló el volcán de La Palma, volvió a salir a la palestra nacional al sugerir que sería bueno bombardearlo para redirigir la lava.
En unas declaraciones a Radio Faycan, aseguró: "¿No hay un avión que vuela y que pueda hacer caer? Llegar y hacer caer ¡bum! y yo, oriento la lava en una dirección. Igual lo que yo digo es un disparate. A mí me da la impresión que desde el punto de vista tecnológico hay que probarlo”.
Continuaba diciendo: ”Situémonos en una realidad de una balsa que pierde agua y queremos que fluya de golpe. Pues habrá que actuar con un sistema que haga caer una pequeña bomba explosiva y destruir una parte y que salga todo a la vez”.