El secretario insular del PSOE y candidato al Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta, ha criticado la gestión del Cabildo Insular con respecto a la implatación de Dreamland en una rueda de prensa. "Seamos conscientes y vamos a proponer al presidente actual (Sergio Lloret) que espabile", y ha añadido que "desde el dia 13 de febrero que se terminó el plazo de alegaciones todavia a día de hoy no existe informe para que técnica y jurídicamente nos diga si en alguna de las alternativas de suelo, incluida la cero, pudiera ir instalado este proyecto".
Acosta enfatizó que "el Partido Socialista va a lucha porque esa instalación esté en la isla de Fuerteventura", aúnque no quiso dejar fuera al resto de Islas, "puede ser complementario en la isla de Gran Canaria o la isla de Tenerife. No cabe la demagogia de dirigentes políticos, ni de mi partido, ni de otras organizacones políticas en la que aquí no y en otras sí", denunció el candidato al Cabildo Insular.
Una guerra casi perdida
El proyecto Dreamland Studios en Fuerteventura —concretamente, al límite del Parque Natural de las Dunas de Corralejo, de los últimos parajes de naturaleza virgen en Fuerteventura y cercano a varias zonas protegidas— se podía considerar, casi desde el principio, como una guerra perdida. Ni siquiera el intento por parte del Cabildo majorero de blindar el proyecto declarándolo bien de interés insular sirvió. Tal es así que todo acabó con la ruptura del gobierno por dentro, con el presidente Sergio Lloret expulsando a los siete consejeros que votaron en contra de su declaración. Esta tuvo que aprobarse en una segunda votación, a finales de 2022 y, esta vez, el pleno sí lo aprobó.
Entra, entonces, otro personaje en la historia: el Gobierno de Canarias que informa desfavorable el parque temático y comercial Dreamland, lo que aboca al fracaso al proyecto capitaneado por el empresario José Antonio Newport. Para el Ejecutivo, este proyecto no tenía un carácter estratégico y, además, cuestionó la magnitud e intensidad de sus parámetros urbanísticos —una construcción sobre una bolsa de suelo rústico con una edificabilidad bruta de 112.000 metros cuadrados, con edificaciones que pueden alcanzar las cuatro plantas y los 25 metros de altura y encontrarse en una zona de alto valor paisajístico y ambiental—. Dreamland Studios en Fuerteventura había llegado a su fin.
De Fuerteventura a Gran Canaria
Tocaba, entonces, poner la vista en otro emplazamiento para continuar con Dreamland. Así que, el Grupo Newport cambió Fuerteventura por Gran Canaria para reubicar su proyecto. La compañía, a través de un vídeo colgado en YouTube, anunciaba que Telde sería el siguiente objetivo y se vinculó a Lopesan como socio en esta aventura. El documento audiovisual sitúa la ciudad audiovisual en el Club El Cortijo, propiedad de Lopesan desde hace tres años después de que la empresa Club de Campo El Cortijo de Gran Canaria SA –con Agustín Manrique de Lara al frente– entrara en concurso de acreedores en 2017.
Las instalaciones de El Cortijo, que cuentan con campo de golf, pistas de tenis y pádel, y picaderos de hípica –la mayoría cerrados actualmente–, ocupan unos 100.000 metros cuadrados, 60.000 menos que los que iba a llenar el emplazamiento original de Dreamland junto a las Dunas de Corralejo. Del proyecto original en Corralejo, que contaba con cuatro áreas diferenciadas –en las que sobresalían platós, oficinas, camerinos, talleres, helipuerto o locales comerciales–, la idea proyectada en Telde mantiene los espacios destinados al ocio del público general: un parque temático de realidad virtual y un centro de ocio tecnológico.
Diversificar la economía de Fuerteventura
El secretario insular del PSOE también ha insistido en la relevancia económica del proyecto durante la rueda de prensa. "Creo en un proyecto de cine y de ocio tecnológico como este. Un proyecto que diversifica la economía, que crea empleo, que nos pone en el mapa empresarial. Dreamland debe estar en esta isla y no se le puede poner cortapisas", insisitió Blas Acosta.
"Si lo quieren llamar Pacto Dreamland, será el Pacto Dreamland, pero es una apuesta por el futuro y por el presente de la juventud y de las empresas y la diversificación económica de Fuerteventura", sentenció el candidato al Cabildo de Fuerteventura.