El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través de la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Sagulpa) licitará durante el próximo año la ejecución de un nuevo depósito municipal de vehículos, que estará situado en el Mirador del Valle de Jinámar. Este espacio, que ya cuenta con proyecto de ejecución y un presupuesto de 1.968.662,94€, contará con un total de 470 plazas, divididas en dos parcelas: la primera será para el depósito de vehículos en estancia temporal y contará con una superficie de 10.830 metros cuadrados y 330 plazas para coches y 45 para motocicletas.
La segunda, de 5.238 metros cuadrados, estará destinada al depósito de vehículos en espera de resolución judicial y tendrá 140 plazas para coches. Por último, 35,78 metros cuadrados estarán ocupados por la oficina de control. Se estima un plazo de ejecución de las obras de 12 meses.
16.000 metros cuadrados
De esta forma, se acondicionarán unos 16.000 metros cuadrados de la parcela –que tiene una superficie aproximada de 37.000 metros cuadrados–, correspondientes a la parte que presenta menos desnivel, lo que redunda en un menor coste de los trabajos, ya que el espacio presenta una topografía muy accidentada, siendo necesaria la ejecución de muros de contención o bien taludes, relleno y explanación de tierras para su uso.
El objetivo de esta nueva infraestructura es generar un espacio con mayor número de plazas en un lugar que será propiedad del Ayuntamiento, suponiendo un ahorro en los costes actuales del servicio de depósito de vehículos.
Actualmente, constan en el Registro cerca de 400 vehículos, de los cuales el 50% son judiciales. El depósito municipal principal, situado en la calle Juan Domínguez Pérez (El Sebadal), cuenta con una capacidad de 129 plazas. Por otro lado, el depósito auxiliar del Lloret tiene aproximadamente 300 plazas, e implica el pago anual de 36.000 euros. El planeamiento en vigor para el área en cuestión es el Plan General Municipal de Ordenación Urbana de Las Palmas de Gran Canaria, cuya aprobación definitiva se produjo en octubre de 2012.
Imbornales para la recogida del agua
Para salvar los desniveles existentes en la zona a acondicionar, se realizará una excavación y explanación de tierras. Por ello, el principal trabajo será de desmonte y retirada de material sobrante. Para evitar la realización de muros de contención y así ahorrar costes, se plantea la realización de taludes en las zonas a acondicionar, que además garantizarán su estabilidad, especialmente en caso de lluvia. La superficie resultante disponible para el estacionamiento de vehículos se pavimentará mediante un firme asfáltico sobre una subbase de grava compactada.
Debido a la gran superficie a acondicionar, que deberá evacuar el agua de pluviales a la red municipal, y para evitar colapsar la misma en momentos de lluvias de gran intensidad, se dejarán algunas partes destinadas a estacionamiento sin tratamiento de firme asfáltico. En estas partes, la terminación será en grava compactada, absorbiendo el propio terreno el agua de lluvia.
Se dispondrán imbornales para la recogida del agua de lluvia, que se canalizará hasta la red municipal existente. Previamente a la conexión a la red municipal se dispondrá un depósito que, mediante la compartimentación oportuna, tendrá una parte de separador de grasas-hidrocarburos y otra de depósito propiamente dicho para recoger y almacenar el agua procedente de precipitaciones.
Árboles para embellecer
El agua almacenada se utilizará para riego de jardines y como abasto en aseos de la oficina de control. Asimismo, el depósito irá provisto de un rebosadero que, en caso de exceder su capacidad, evacuará el agua sobrante a la red municipal de pluviales. En la parcela de mayor superficie se disponen áreas de jardín, a modo de “barrancos” con plantación de árboles de porte mediano. Esto dividirá en partes la superficie a ocupar, evitando la monotonía de un espacio tan grande con el mismo tratamiento y uso.
En el perímetro de la zona acondicionada se plantarán árboles de medio porte para embellecer el entorno de la nueva instalación. Además, se dispone un vallado metálico perimetral que proteja la entrada de intrusos. La plantación de árboles se realizará por el exterior del vallado. Se dispondrá también de una instalación de alumbrado mediante báculos y un circuito cerrado de cámaras de seguridad.