El antiguo Estadio Insular ha pasado en unas décadas de vivir tardes de gloria con la UD Las Palmas a ser protagonista de una polémica sobre la posible tala o trasplante de varios árboles plantados en su interior. La instalación, reconvertida a parque urbano, ha sido elegida por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria para celebrar las galas del Carnaval 2025 y está sobre la mesa retirar el arbolado para colocar el escenario. La idea, que no ha sido muy popular, ha enfadado a familias del barrio que llevan a sus hijos a divertirse en los columpios cada tarde porque lo consideran “un mal ejemplo para la infancia”.
Un grupo de madres y padres han empezado a conformar una plataforma bajo el nombre de Somos Alcaravaneras para mostrar su indignación, no solo con que se valore la posibilidad de talar árboles, sino con que la fiesta principal de la ciudad tenga lugar en el parque urbano ocasionando ruidos y molestias al vecindario. Su intención es presentar un escrito —al que ha tenido acceso Atlántico Hoy— tanto en el Consistorio como en el Cabildo Insular con el objetivo de mostrar su malestar. La recogida de firmas por todo el municipio también está entre sus planes. De hecho, ya han conseguido reunir más de 200.
"Desmantelamiento"
El texto recoge, sobre el corte de árboles, que se le estará transmitiendo un mal ejemplo a los niños y niñas de la ciudad si asisten “a un desmantelamiento del arbolado de sus espacios de juego y al confinamiento de este a un pequeño espacio vallado”. “Esto último esperamos que sea subsanable en cuatro meses, pero la tala y trasplante se prevé irreversible”, añade. Además, en la tarde de este miércoles asistieron a una reunión convocada por la Mesa del Árbol donde expusieron su punto de vista.
Ina Mateos, quien forma parte de la plataforma, está muy preocupada por lo que pueda ocurrir. En especial, se encuentra a la expectativa por el ruido que se pueda producir durante las noches de Carnaval: “Mi vivienda, por ejemplo, está a 10 metros del perímetro del parque. Si queremos descansar y poder ir a nuestros trabajos tranquilos y que mi hijo vaya a su cole descansado, no voy a poder quedarme en mi casa, me tendré que ir a la de mis padres”.
"En una jaula"
Insiste en que se trata de un parque que usan los niños a diario y se verán jugando entre vallas. “Los van a meter en una jaula”, sentencia. No solo pone el foco en el interior del viejo Estadio Insular, sino también en los alrededores. “En este barrio es imposible aparcar en el día a día. El Ayuntamiento aún no ha desvelado cómo va a ordenar el tráfico, pero estamos hablando de que no hay un parquin grande que aloje a una afluencia de público que entendemos que va a ser gorda, no salen los números”, reflexiona.
En el escrito reflejan, además del impacto acústico, varios puntos a tener en cuenta e insisten en la posible tala. Consideran que se estaría limitando el uso del parque y se sorprenden de que “el Ayuntamiento esté dispuesto no solo a inutilizar durante un periodo de cuatro meses su pleno uso; sino a desmantelar parte de su infraestructura, y en especial las zonas arboladas, para llevar a cabo la celebración de un evento temporal como es el Carnaval”.
Alternativas
El documento agrega que “cualquier decisión, ley o política que pueda afectar a la infancia debe tener en cuenta qué es lo mejor para los niños y niñas” “Sin embargo, con la intervención pretendida, no sólo se obvia este precepto sino que se va a contracorriente de debilidades identificadas en dicho plan, como es la escasez de parques, considerados vía de escape, relajación y una herramienta de socialización especialmente valiosa”, añaden.
Otro asunto es el de buscar alternativas de ubicación más adecuadas para celebrar el Carnaval. Proponen opciones como INFECAR, la Plaza de la Música y el Parque Litoral del Rincón, en definitiva, “donde el evento pueda desarrollarse evitando incomodidades y molestias”.
Falta de infraestructuras
Todo unido a la “falta de infraestructuras” o el cuidado del medioambiente. “Hablamos de habilitar un espacio de 6.000 metros cuadrados —del que más de 2.000 es zona arbolada— en el que se proyecta contener un gran escenario con escenografía y sistema audiovisual de grandes dimensiones, backstage, zona para un público de más de 5.000 personas y reservar áreas para, por poner algunos ejemplos, los servicios de emergencias”, detallan.
Mateos recalca que, por otro lado, también protestan por la falta de transparencia por parte del Ayuntamiento o la poca participación que está teniendo la vecindad más allá, dice, “de una asociación que parece que sí está de acuerdo con que esto suceda [la celebración del Carnaval en el Estadio del Parque Insular]”.
“No tenemos nada en contra de ellos [de la Asociación de Vecinos de Las Alcaravaneras], pero sí queremos unir fuerzas y crear conciencia entre todos, porque la mayor parte de los vecinos no estamos representados ahí y no hemos tenido oportunidad de manifestarnos”, sentencia. Además, señala al Consistorio para apuntar que las decisiones que se están tomando van en contra de la cogobernanza.
Reunión de vecinos
La tarde del miércoles, un centenar de vecinos celebraron en la Grada Curva del Insular una asamblea ciudadana en la que se acordó unir fuerzas para defender las zonas verdes del recinto y evitar que el Carnaval —con sus ruidos y molestias. como el cierre del espacio— se celebre en el parque.