Los socavones que complican caminar por Mesa y López: “He visto caerse a gente mayor”

Varios vecinos y comerciantes de la zona advierten del peligro que suponen para las personas que circulan por los alrededores

Guardar

Uno de los socavones en la calle Pelayo / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO
Uno de los socavones en la calle Pelayo / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO

Mesa y López es testigo cada día de cómo muchas personas caminan por sus aceras. Para ir a trabajar, dar un paseo sin un objetivo claro o hacer la compra son varios motivos por los que alguien se acercaría por una de las áreas comerciales más conocidas de Las Palmas de Gran Canaria. Aunque, según cuentan algunos vecinos y trabajadores de la zona, hay que hacerlo con cuidado porque existen socavones por los que se cae gente con frecuencia.

El problema, según cuentan a Atlántico Hoy, no es nuevo. “Mi madre se cayó hace dos años frente al centro de salud de Alcaravaneras y se partió una pierna”, protesta una joven. Ella no entiende cómo es posible que para bordear las palmeras usen un material similar al azulejo porque “cuando llueve resbala”. Trabajar cerca de allí le ha permitido observar diferentes situaciones: “He visto muchas caídas”.

Uno de los socavones / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO
Uno de los socavones / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO

Sin solución

Al doblar la esquina está la calle Olof Palme. El trabajador de un local que prefiere mantenerse en el anonimato asegura que ha visto caerse a mucha gente mayor. “El perfil de gente que vive por aquí es de la tercera edad”, resalta. “Cuando eres joven es diferente porque tienes más agilidad”, añade. Además, relata que este martes se tropezó una persona.

Otro residente que ha querido contar su testimonio lleva a este periódico hasta la calle República Dominicana de la capital grancanaria y apunta que uno de los socavones tiró al suelo a una vecina suya. Se muestra indignado porque, según cuenta, el Ayuntamiento no les ha puesto una solución y considera que la situación es preocupante.

Uno de los socavones / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO
Uno de los socavones / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO

"Tropezones veo muchísimos"

Pero su relato no acaba ahí. “En la acera de enfrente se cayó una vez mi suegra y se dañó el codo”, subraya. Indica que se ha puesto en contacto con la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria y lo han remitido a la App LPGC Avisa. “Lo he hecho pero aún así no me han dado una respuesta”, agrega.

No son los únicos que denuncian lo difícil que puede resultar dar una vuelta por los alrededores. El trabajador de un local en la calle Pelayo es tajante: “Sí, se ha caído gente, tropezones veo muchísimos”. “El otro día, por ejemplo, un señor”, añade. Lo llamativo de su testimonio es que solo lleva allí cuatro meses.

Uno de los socavones / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO
Uno de los socavones / ATLÁNTICO HOY - MARCOS MORENO

"Tuve que socorrer a una señora"

La misma persona relata que la gente que conoce la zona prefiere caminar por la carretera, sobre todo cuando se trata de alguien en silla de ruedas. “El otro día pude ver cómo una niña venía con un patinete y frenó en seco frente al socavón, si no habría salido disparada”, apostilla.

Otra chica que lleva la mitad de tiempo que él cerca de donde se encuentran los socavones ha sido testigo de caídas. “No hace mucho tuve que salir corriendo a socorrer a una mujer mayor que estaba en el suelo”, dice indignada.