El Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria considera que los altos sobrecostes que tendrá que pagar el Consistorio capitalino a la empresa Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) –más de un millón de euros– es “dinero improductivo” porque sale de los impuestos cobrados a los ciudadanos sin que se use para prestar servicios públicos.
La corporación municipal sacó adelante el contrato por la vía de emergencia para cubrir el servicio de limpieza en los centros de Educación Infantil y Primaria, las sedes de la Universidad Popular y de la Escuela Municipal de Educación Musical y los centros de promoción sociocultural.
"Una gestión pésima"
Ignacio Guerra, concejal de los populares, afirma en declaraciones a Atlántico Hoy que se trata de “un ejemplo palmario de qué es lo que ocurre al no renovar los contratos”. Considera, además, que ha habido “una gestión pésima”. “Las prórrogas no se hacen para que se ejecuten porque sí, se realizan para que cuando llegue al final del contrato prepares el próximo y tengas dos años de margen”, añade.
El edil no descarta la posibilidad de que la compañía siga requiriendo más pagos de otros momentos en el futuro. “Hay una sentencia que los ha avalado”, comenta. “Si tú llegas a la finalización del contrato, la financiación de los prórrogas y siete años después estás cobrando con precios de 2011, no puedes prestar el servicio por el mismo valor económico que en 2024, las empresas están pilladas”, apostilla.
"Afectan al ciudadano"
“Aquí hay dos cuestiones”, señala Guerra, "que afectan al ciudadano”. “Gráficamente una son los servicios, tú no puedes dar los mismos con un contrato de 2011 en 2024. Es imposible porque no tienes la maquinaria y el personal renovado”, incide. Declara que la otra es que “estás pagando sobrecostes e intereses de demora que salen de los ciudadanos, es dinero improductivo dinero que se está cobrando a la gente con impuestos”.
“Sabemos cómo están los impuestos ahora mismo y cómo está el nivel de vida, como está la inflación y ese dinero no se está yendo en cosas productivas para mejorar la ciudad, sino en sobrecostes e intereses de demora. Eso es lo más absurdo que puede haber, pero fundamentalmente los servicios no se están prestando como se debe, por eso está la ciudad como está”, culmina.
Contexto
El contrato en cuestión, que ha sido revisado al alza en dos ocasiones a petición de la empresa que presta el servicio, se tramitó el 8 de marzo de 2019, después de que la Junta de Gobierno del Ayuntamiento —entonces con Augusto Hidalgo en la acaldía—, aprobara la rescisión del contrato a Ralons —empresa fundado por Miguel Ángel Ramírez— y adjudicarlo de forma temporal a FCC. Cinco años después, sigue prorrogado.
FCC, en el concurso de licitación, fue considerada como la empresa que presentó la tercera mejor oferta para adjudicarse el servicio. Sin embargo, fue la elegida por el gobierno municipal para relevar a Ralons porque la firma que ocupó el segundo lugar, Hermanos Santana Cazorla SL, ya no prestaba este tipo de trabajos.