El ruido ya no es la principal polémica del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria. La noticia de la tala y trasplante de árboles y palmeras del parque del Estadio Insular para el montaje del escenario ha suscitado opiniones que se suman a la preocupación del estado de la vegetación de la ciudad, cada vez menor también por proyectos como la MetroGuagua y el Paseo Guiniguada.
Ben Magec y la cuenta Vigilantes de los árboles se han pronunciado al respecto y coinciden en el sinsentido que resulta “arrancar” la arboleda para “un acto efímero que dura un mes”. “En Santa Cruz de Tenerife sería impensable talar árboles del parque García Sanabria para montar el escenario”, señala el portavoz de los Vigilantes, Enrique Hernández. Ambas entidades han aprovechado para poner sobre la palestra la escasez de zonas verdes de la capital grancanaria.
Pocos espacios verdes
Las Palmas de Gran Canaria “es la capital de provincia que menos árboles por habitante tiene”, señala la cuenta en favor de la vegetación, a lo que Ecologistas en Acción añade que “la ciudad apenas cuenta con 8,54 metros cuadrados de zonas verdes por habitante”. Estos datos se encuentran por debajo de los estándares recomendados para un desarrollo urbano sostenible.
Y la situación se ve perjudicada por la amenaza que producen los múltiples proyectos urbanísticos, pues, a pesar de que no solo se habla de talar, sino de trasplantar, el resultado no es muy bueno. “Lo hemos visto con la MetroGuagua, los trasplantes no funcionan porque se mueren”, señala Hernández, que comenta también sobre el Paseo de Guiniguada: “pone cuántos árboles se van a quitar, pero no cuántos se van a poner”. Eugenio Reyes, portavoz de Ben Magec, recalca que “para renaturalizar los espacios no hace falta poner más cemento”.
Dinero tirado
“Lo del Estadio Insular es la guinda del pastel”, apuntan desde la entidad defensora del arbolado, ya que “es la única zona verde de Alcaravaneras y es un parque bien hecho, con sus caminos de tierra, césped, árboles y palmeras”.
Junto a Ecologistas en Acción, no conciben que se plantee quitar árboles para un evento puntual como el Carnaval para el que “este año se gastaron más de un millón en arreglar la zona del Puerto y ha sido dinero tirado”. Lo ocurrido con el espacio de la edición de este año, ha llevado a preguntarse “qué pasará con el parque después de todo”.
La necesidad de árboles
Ben Magec ha convocado la Mesa del arbolado urbano el próximo martes a las 17.00 horas en el parque del Estadio Insular para leer un manifiesto expresando su posicionamiento contra las decisiones que se están tomando por parte del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
“No queremos un tramo más de cemento en los espacios públicos y verdes. Ni que todo el dinero público que se ha usado para los espacios verdes caiga en saco roto. El Carnaval no puede ser a costa de la naturaleza”, expone Reyes.
Desde Ecologistas en Acción y Vigilantes de los árboles defienden el valor de los árboles en las ciudades, que ayudan a regular las temperaturas, cada vez más amenazantes ante el cambio climático, así como a frenar el cauce de las lluvias fuertes.