El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha adjudicado la construcción de 131 viviendas públicas para alquiler asequible en el barrio de Tamaraceite, una inversión significativa de 18.949.366,94 euros financiada por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) del Gobierno de España, mediante los fondos europeos Next Generation.
Esta iniciativa forma parte de la cuarta promoción de viviendas públicas en alquiler emprendida por el consistorio, que actualmente tiene en marcha un total de 268 viviendas públicas en construcción en la ciudad.
Promoción y distribución de viviendas
El proyecto, adjudicado a la empresa Construplan Construcciones y Planificación SL, se desarrollará en una parcela de 4.552 metros cuadrados ubicada en la avenida 8 de marzo, Tamaraceite. La Sociedad Municipal de Gestión Urbanística (Geursa) se encargará de la promoción de las viviendas, que se distribuirán en dos edificios: uno al oeste con 61 apartamentos en seis pisos y otro al este con 70 viviendas en cinco plantas.
Las viviendas incluyen 46 unidades de dos dormitorios y 85 de tres dormitorios, todas con salón-comedor, cocina, baños y solana. Más del 30% del espacio libre del complejo se destinará a zonas verdes, incluyendo áreas para huertos y juegos infantiles, promoviendo así la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono.
Compromiso con la vivienda asequible
Mauricio Roque, concejal de Vivienda, ha resaltado el compromiso del gobierno municipal de construir mil viviendas públicas dedicadas al alquiler asequible y social durante el mandato actual, asegurando más y mejores viviendas para los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria.
Este nuevo desarrollo se suma a otras promociones en Tamaraceite y en León y Castillo, financiadas por el Instituto Canario de la Vivienda (ICAVI), que incluyen 36, 74 y 27 viviendas respectivamente.
Accesibilidad y diseño sostenible
El diseño del proyecto prioriza la accesibilidad, con la inclusión de rampas y escaleras que facilitan el acceso entre los diferentes niveles de los edificios y los espacios públicos colindantes, evitando la construcción de muros y desniveles.
Con esta iniciativa, Las Palmas de Gran Canaria refuerza su compromiso con el desarrollo urbano sostenible y la mejora de la calidad de vida de sus habitantes.