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Las Palmas

Otra noche de caos en Las Palmas: pelea entre seis mujeres en plena calle del Puerto

La trifulca tuvo lugar en la intersección de las calles Nicolás Estévanez y Doctor Grau Bassas | Los vecinos de la zona denuncian que este tipo de incidentes es habitual las noches de los fines de semana

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Una pelea callejera entre seis mujeres en la zona del Puerto-Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria, ha vuelto a encender las alarmas entre los vecinos, quienes denuncian que estos episodios de violencia y desorden son cada vez más frecuentes durante las noches de los fines de semana. El incidente ocurrió de madrugada, justo a la salida de un local de ocio nocturno —en el curce entre las calles Nicolás Estévanez y Doctor Grau Bassas—, y fue captado en video por testigos que no tardaron en difundirlo por redes sociales.

El altercado, que involucró insultos, empujones y golpes entre las seis mujeres, se desató entre varias clientas de un bar de música latina y frente a la mirada de otros transeúntes, algunos de los cuales intentaron intervenir, mientras que otros grababan la escena. Según los vecinos, los enfrentamientos y disturbios son habituales en esta zona, especialmente en las horas más tardías, cuando los bares y discotecas cierran sus puertas.

Malestar vecinal

“Es una vergüenza. Cada fin de semana es lo mismo: peleas, gritos y borracheras. No podemos dormir tranquilos”, comenta uno de los residentes afectados, que ha solicitado medidas más severas por parte de las autoridades locales para controlar el desorden nocturno.

Los ruidos y la tensión generada por este tipo de situaciones han provocado el malestar constante entre los habitantes de la zona, quienes exigen mayor presencia policial y sanciones más estrictas para los locales de ocio que no respetan las normativas de seguridad y convivencia.

Peleas constantes

Hasta el momento, no se ha informado de detenciones relacionadas con esta pelea, pero la preocupación sigue latente entre la comunidad, que insiste en que este tipo de sucesos son una constante, afectando la calidad de vida en una de las zonas más concurridas por el ocio nocturno de Las Palmas de Gran Canaria.

Las autoridades locales aún no han emitido un comunicado oficial, pero el incidente revive el debate sobre el control del ruido y la seguridad en las calles durante las noches de fin de semana en zonas de alto flujo de locales nocturnos.