Las obras en la ciudad no dejan de dar dolores de cabeza al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. Uno de los trabajos más sonados es el que empezó en junio de 2023 entre las calles General Bravo y Muro con el objetivo de hacer realidad el Eje Peatonal Vegueta-Triana. Al principio estaba pensado para que se terminara el pasado 28 de febrero, pero una serie de imprevistos han provocado que vaya por la cuarta prórroga, otro periodo de gracia que fija el plazo en el próximo 26 de julio — cinco meses después de la fecha inicial—.
Quizás no sean los 21 años que hicieron falta para acabar el Monasterio del Escorial en Madrid, pero tantas ampliaciones en un corto periodo de tiempo resultan llamativas. El Consistorio aprobó este martes el nuevo aplazamiento en una resolución firmada por el concejal de Urbanismo, Mauricio Roque, a la que ha tenido acceso Atlántico Hoy. La faena, encargada a la empresa Abaldo Construcciones, afecta al tramo que abarca las vías Malteses y San Nicolás. Por el momento, tenían hasta el 28 de junio.
Los motivos
La razón que llevó al supervisor de la obra el 18 de junio a solicitar la ampliación es que el proyecto se encuentra en fase de aprobación de un modificado por parte del órgano de contratación. El cambio lo pidió la dirección de los trabajos el 13 de mayo —con variación presupuestaria y “por circunstancias sobrevenidas e imprevisibles en el momento que tuvo lugar la licitación”— como publicó este periódico hace tan solo unas semanas.
Roque detalló durante una comisión de pleno que la consecuencia de modificar lo que estaba redactado es que las obras serán el 15% más caras, pasando de costar 563.900 euros a 648.450 recogidos en el presupuesto total. El edil añadió a su explicación que la variación presupuestaria tiene relación con multitud de servicios de subsuelo no recogidos en la documentación previa y que ha supuesto la alteración del trazado. La financiación está a cargo tanto de una subvención recibida por el Patronato de Turismo del Cabildo Insular como de fondos municipales propios.
Cronología
El objetivo de los trabajos es consolidar el eje a través de las calles General Bravo, Malteses, San Nicolás y Muro para crear una plataforma única con aceras al mismo nivel. Para entender mejor la historia es necesario empezar desde el principio. El contrato se formalizó el 15 de junio de 2023 y el margen para finiquitar era febrero de este año, pero todo se truncó cuando, el 22 de enero, Abaldo Construcciones pidió más tiempo, por lo que el Ayuntamiento aceptó darle hasta el 29 de abril.
La empresa justificó que era necesario porque había padecido retrasos en el traslado de permisos para cortar la calle y por culpa de la colocación de un andamio en la fachada del Gabinete Literario autorizado por Urbanismo. Fue retirado el 4 de octubre “tras más de dos meses colocado e impidiendo terminar tajos de instalaciones soterradas, solera y colocación de pavimento de acera”.
"Se veía venir"
La cosa no quedó ahí. El 11 de abril, la compañía adjudicataria volvió a tocar en la puerta del Ayuntamiento para solicitar una nueva ampliación por varios motivos: un incremento “considerable” de las mediciones, retraso derivado de la disminución de rendimientos en las partidas de pavimento de piedra natural por su “excesivo peso”, irregularidades del adoquín rústico y atrasos en la ejecución de conexiones en la red de agua de abastecimiento “debido a su complejidad tanto en la confluencia con la calle Malteses como en Remedios”. ¿La nueva fecha? El 14 de junio. Después vino la prórroga que otorgó dos semanas más.
Gustavo Sánchez, concejal del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento capitalino, asegura en declaraciones a este diario que, aunque en la comparecencia de la comisión de pleno no le quisieron responder sobre la posibilidad de que hubiera una cuarta prórroga, “se veía venir”. “Cuando terminen, una obra con dos inauguraciones. Una en precampaña de las europeas para abrir un tramo y la segunda a la finalización de los trabajos”, exclama.
“Esta obra causó la primera modificación en el recorrido de la Procesión Magna en Semana Santa en 50 años de historia y otros trastornos en la organización de 2024. Antes de solicitar la Comparecencia recibí por escrito una respuesta diciendo literalmente que la Semana Santa se había celebrado con completa normalidad, cuando en realidad se había producido un hecho absolutamente excepcional. Ahí obtuve una señal más de que tenemos un gobierno municipal totalmente alejado de la realidad que se vive en la calle”, sentencia el edil.