El bloqueo en la adjudicación del nuevo contrato para gestionar las once escuelas infantiles del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, un proceso recurrido a final de enero –dentro de los plazos establecidos en el propio concurso– por una de las empresas licitadoras, ha dejado sin cobrar la nómina de enero a los trabajadores –unos 200– de las guarderías municipales.
El problema tiene como raíz el contrato entre el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Trasa Europa Servicios y Gestión y Yurena del Pino Alonso: su adjudicación, propuesta en noviembre por la mesa de contratación del propio consistorio, no ha llegado a publicarse en la Plataforma de Contratación del Sector Público al ser recurrida por otro de los licitadores –Koala Soluciones Educativas–.
Mitad del sueldo
Con la documentación sin firmar y con la prórroga del servicio vencida desde el 29 de noviembre, la empresa ha trasladado a los trabajadores que en las próximas horas intentará abonar la mitad de la última nómina, pero que debe ser el propio Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria quien aporte una solución para afrontar con garantías de pago su servicio durante los próximos meses –a la espera de la resolución del recurso–.
Desde el gobierno municipal, ante este problema, admitieron este lunes a Atlántico Hoy que "se ha tramitado, por la vía de urgencia, un expediente para pagar a la empresa los servicios de diciembre y enero [los meses que van más allá del periodo prorrogado]". Además, garantizan que "el servicio, que en la actualidad da respuesta a 1.250 niños y niñas de cero a tres años, se seguirá prestando" en las once escuelas municipales pese a la nulidad del contrato.
Reunión
Representantes de la UTE trasladaron a los trabajadores que este martes mantendrán una reunión con Lourdes Armas, concejala de Educación del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, para encontrar una solución. El comité de empresa también ha trasladado su intención de mantener una comunicación fluida con el consistorio para evitar los problemas que sacudieron al servicio cuando la gestión correspondía a Ralons.
La oferta de la UTE formada por Trasa Europa Servicios y Gestión y Yurena del Pino Alonso fue la propuesta por la mesa de contratación del consistorio para gestionar las once escuelas infantiles públicas de la ciudad durante los próximos tres años (más una prórroga máxima de otros dos años). El contrato tiene un valor de 30 millones de euros y la alianza entre las dos empresas logró la mayor puntuación (93), por delante de Koala Soluciones Educativas (89,22) y la UTE formada por Profolp y Chiquitín (83,80).