El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, junto al Instituto Canario de las Tradiciones y Los Gofiones, celebrará la noche de Finados el 31 de octubre con una emotiva recreación teatral en la Alameda de Colón, reviviendo el devastador impacto del cólera de 1851.
La dramatización, titulada Ánimas, la muerte sin campanas durante el cólera de 1851, permitirá a los asistentes conocer cómo esta enfermedad arrasó la ciudad, recordando a aquellos que perdieron la vida durante la epidemia. La alcaldesa Carolina Darias destacó la importancia de este evento para mantener vivas las raíces y tradiciones canarias, subrayando que recordar el pasado ayuda a forjar el futuro de la ciudad.
Darias aseguró estar convencida de que “no hay nada más potente que conocer nuestro pasado, que la ciudad recuerde de dónde venimos para afianzarnos en lo que somos y en lo que queremos ser”. De ahí que sus palabras sirvieran para volver la vista atrás y recordar los “cordones sanitarios de esa época, que no se podía salir de las casas y los muertos que no tenían donde encontrar sepultura ni campanas que sonaran”.
Castañas y piñas asadas
La alcaldesa compartió su visión sobre que “con la mirada puesta en 1851, podemos entender mejor lo que sucedió en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria que aglutinó el mayor número de muertos de toda la isla”.
El concejal de Cultura, Josué Íñiguez, subrayó la relevancia de este evento para “mantener un diálogo entre generaciones” y entender mejor la historia de Las Palmas de Gran Canaria. Se invita a los asistentes a vestirse con atuendos tradicionales para sumergirse plenamente en la cultura canaria.
A las 22.00 horas, la celebración continuará en la Plaza de Santa Ana con un gran baile tradicional, donde Los Gofiones pondrán la música en una noche dedicada a revivir las costumbres y valores locales. Los asistentes podrán disfrutar de más de 300 kilos de castañas y piñas asadas, proporcionadas por MercaLasPalmas, repartidas en cuatro puntos entre la Alameda de Colón y Santa Ana.