Las obras de la escollera de San Cristóbal, declaradas de emergencia por el riesgo de colapso de la avenida marítima de Las Palmas de Gran Canaria y de una parte de la GC-1, costarán 1,2 millones de euros más -7,4 millones en lugar de 6,2- por modificaciones técnicas, culminarán en mayo y recuperarán la playa del Castillo.
Durante una visita a los trabajos, que comenzaron en julio de 2022, el consejero de Obras Públicas del Gobierno canario, Sebastián Franquis, ha destacado que se ha conseguido recuperar el paseo, con más capacidad y amplitud, y también se recuperará la parte de la playa que ahora está inutilizada por herramientas y maquinaria de la obra, ya que el compromiso con los vecinos era dejarlo tal y como estaba y que se pueda volver a disfrutar como antes.
Poner a punto el paseo
"Con esta obra hemos acabado con un problema serio en tan solo ocho meses. La avenida marítima vuelve a recuperar la seguridad que tenía anteriormente", ha apuntado Franquis, que también ha señalado que se ha logrado resolver una obra que generaba algún desencuentro o "dificultades de coordinación" ente el Cabildo de la isla y el Ayuntamiento de su capital, que se encargará de continuarla y poner a punto el paseo.
Franquis ha destacado que los temporales de los últimos meses no han afectado a la obra y ha señalado que el desarrollo de los trabajos, "más allá de utilizar un carril durante la noche durante algunos días", no ha supuesto ninguna dificultad para el tráfico de la GC-1, "muy importante para la movilidad de la ciudad". Una vez terminada la escollera contará con un frente de más de 500 metros, según ha explicado el director de la obra, José Luis Pérez, que espera que la nueva infraestructura "dure 75 o 100 años".
Ha agregado que "más que restituir la escollera original", la solución ha sido construir un dique con un espaldón protegido con varios mantos de bloques de entre cuatro y siete toneladas, según la zona, frente a los que había previamente, de apenas una tonelada. La mayor dificultad, ha dicho, ha sido compatibilizar la obra con la ampliación de la avenida hasta los 7,5 metros, tal y como había pedido el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.