María Esperanza Talavera se enamoró, en una visita a Zamora, de la escultura de un Cristo esculpido por Juan de Anchieta (1462-1523) que ahora debutará en la Semana Santa de Las Palmas de Gran Canaria. Desde hace 31 años es cofrade de la Hermandad de Los Dolores de Triana y ha decidido donarle la imagen para que pueda salir en procesión el próximo Martes Santo. La alegoría católica recibe el nombre de 'Nuestro señor del perdón y la misericordia'
Mientras almorzaba un día al lado del Ayuntamiento de la ciudad castellano-leonesa se percató de la existencia de un anticuario. “Entré y vi que había imágenes preciosas”, cuenta a Atlántico Hoy. Dice que ella estaba buscando un Señor que tuviera la coronación de espinas con la caña. “Había uno sentado como a mí me gustaba, pero tenía los ojos cerrados mirando al suelo”, afirma. Apostilla que eso no la convencía porque “si salía a la calle las personas no le verían los ojos”.
Contenta con el resultado
Al lado de esa figura vio la que al final acabaría comprando. Se la trajo para la Isla y quedó con el tallador, un empleado del Cabildo Insular al que conoció a través del que fuera presidente de la Unión de Hermandades y Cofradías, Guillermo Mariscal. Asegura que quedó muy satisfecha con el resultado final.
El siguiente paso fue acudir a Mila Gómez, una restauradora del Cabildo y de la Catedral. “Ella hizo la policromía, los colores y me lo dejó como una maravilla”, resalta. “El traje que lleva el Cristo lo confeccionó la famosa diseñadora de moda cálida canaria, Nuria González”, añade.
Un Cristo especial
José Luis Rivero, hermano mayor de la Hermandad, pone en valor que esta donación significa algo importante. “Nosotros éramos la única que no tenía Cristo”, asevera. Destaca que llevaban detrás de este trámite varios años, pero por distintos motivos no lo habían podido conseguir. “Pero este año sí, es una novedad y un aliciente para que la gente salga a la calle y sea un atractivo más para la gente que va a ver la procesión”, afirma.
“Es muy especial porque tiene una cara muy de pena. Es el clásico Cristo que se llamaba de la caña, pero aquí lo hemos llamado el Cristo del perdón y la misericordia. En la salida procesional este año podremos ver qué devoción puede atraer”, sentencia.