Óscar Puente es el nuevo ministro de Transportes y Movilidad Sostenible sustituyendo a Raquel Sánchez, cuyos méritos y logros son más bien difusos y faltos de efectividad y profesionalidad. Pero es que ahora viene Óscar Puente, de escasa presencia últimamente en la política nacional, exalcalde de Valladolid entre 2015 y 2023 llegando con anterioridad y con éxito a ser actor, con actuaciones en la Gran Vía de Madrid e incluso en París.
Desde 1990 y con 22 años empezó a militar en el PSOE. Durante años se ha mantenido muy cercano a Pedro Sánchez, estando al frente de la Portavocía de la Ejecutiva del PSOE hasta el 2021. Posteriormente nada destacable, salvo la sorprendente y mordaz réplica con la que se enfrentó a Núñez Feijóo en su fallida investidura por orden de una premeditada estrategia de Pedro Sánchez.
Óscar Puente, en su toma de posesión, ha explicado que una de sus máximas es “hacer felices a los ciudadanos que se van a beneficiar de las políticas que desde este Ministerio se desarrollen. Ciertamente es una responsabilidad para este Gobierno que así sea”.
Por otro lado, añadió: “Hay algo a lo que no renuncio y es dejar mi impronta. Estoy en política para hacer política y mi objetivo es que España haga una transición hacia la movilidad sana y sostenible y hacerlo a alta velocidad: ese es mi propósito. El resto de las cosas están magníficamente bien encaminadas, y hay muchas infraestructuras bien programadas en marcha que van hacer de España un país mucho más competitivo. Y para ello necesitaré la ayuda de todos, incluyendo el resto de las administraciones, comunidades, autónomos y ayuntamientos”.
Pues bien, este es el panorama. Antes de la elección del nuevo ministro nos preguntábamos: ¿El transporte en general y el de viajeros y mercancías en particular puede esperar? Y decíamos que difícilmente.
Temas pendientes
Si en esa ocasión señalábamos como temas pendientes y preocupantes la Movilidad Sostenible, la Ley de la Cadena del Transporte, la Movilidad y Agenda Urbana, la llegada de los megacamiones de 44 toneladas y de los vehículos ecomodulares (megatrailers/duotrailers), junto a la bonificación pendiente de 20 céntimos/litro en el combustible a los transportistas (ahora está en 5 céntimos), junto a la subida de precios en talleres, recambios, neumáticos, seguros, salarios, reducción de la actividad, etc., ahora vamos a tener que añadir la reducción de la jornada laboral con los mismos salarios sí o sí, dada la continuidad de Yolanda Díaz en el Ministerio de Trabajo.
En general y sin entrar en más detalles ésta es la situación actual del transporte, cuyos problemas tienen una solución cuanto menos dudosa y lo digo destacando algunas de las frases del nuevo Ministro “Una de mis máximas es hacer felices a los ciudadanos“. Otra interesante: “Estoy en política para hacer política y mi objetivo es que España haga una transición hacia la movilidad sana y sostenible y hacerlo a alta velocidad, ese es mi propósito”.
Faltaría más y que se alegren los ciudadanos de Extremadura por la alta velocidad. y para todo esto necesitará la ayuda de todos: “Resto de administraciones, comunidades, autónomos y ayuntamientos”. Es evidente que se olvidó de los empresarios.
Y para finalizar algunas consideraciones. La elección de Óscar Puente como nuevo ministro de Transportes y Movilidad Sostenible tiene un marcado signo político, por ser un histórico del PSOE y por el conocido y abrupto discurso contra Núñez Feijóo ordenado por Pedro Sánchez que no se atrevió a realizar.
Si tenemos en cuenta que el transporte (marítimo, aéreo y terrestre) es el sector más complejo y determinante de la economía de los países y en nuestro caso también de sus autonomías, imagínense que su responsabilidad ha recaído en manos de un personaje cuya preparación profesional y técnica desconocemos, salvo su afiliación y orientación política. Si bien el transporte está transferido a las Comunidades Autónomas conviene abrir el ojo sobre todo con las que son de diferente signo político como Canarias, que tiene sus problemas propios que se deben resolver aquí, pero otros dependen del Ministerio sobre todo los referentes a la inversión de obras viarias, aplicación de la legislación general, etc.
En definitiva, a mí, Óscar Puente, ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, como político me interesa poco, habrá que esperar al programa que aplique para resolver los problemas del transporte, que no son pocos, tanto a nivel nacional e internacional, como de Canarias. Tiempo al tiempo…