Vecinos del casco histórico de Aguere aseguran que el ayuntamiento no respeta la normativa de ruido

La Asociación de Vecinos ‘Casco Histórico de La Laguna’ ha acudido al Diputado del Común para que interceda ante el consistorio y pida que se respete la norma

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El casco histórico de La Laguna y Rafael Yanes, diputado del común, que ha atendido a los vecinos de Aguere por sus quejas sobre el ruido./ ÁLVARO OLIVER - ATLÁNTICO HOY / DIPUTACIÓN DEL COMÚN
El casco histórico de La Laguna y Rafael Yanes, diputado del común, que ha atendido a los vecinos de Aguere por sus quejas sobre el ruido./ ÁLVARO OLIVER - ATLÁNTICO HOY / DIPUTACIÓN DEL COMÚN

Representantes de la Asociación de Vecinos ‘Casco Histórico de La Laguna’ han acudido este lunes al Diputado del Común, Rafael Yanes, para solicitarle que interceda con el ayuntamiento del municipio para que se respete la ordenanza municipal de ruidos. Según ha explicado Pablo Reyes, su presidente, el ocio nocturno -focalizado en dos zonas principalmente, el Cuadrilátero y la plaza de la Concepción- es el principal desencadenante de las molestias, aunque afirma que ni siquieral el consistorio cumple con las ordenanzas cuando desarrolla actividades en La Laguna.

A modo de ejemplo, los vecinos han explicado cómo un pequeño escenario de dinamización instalado en Navidad en la plaza Antonio Mederos Sosa, frente al Mercadona, generó más de 90 decibelios de ruido -calculados con un medidor de bolsillo de la asociación- cuando la normativa marca un límite de 50 durante el día. 

Gritos en la calle y suciedad

Por la noche, cuando el límite se reduce a 35 decibelios, el ocio nocturno impide el descanso de los vecinos, aseguran. No tanto por el ruido de los locales -de los que dicen que algunos también incumplen la normativa pero, por lo general, no son el foco del problema-, sino por los griteríos de la gente que entra y sale de los locales.

Después, lamentan, los camiones de limpieza se ven obligados a pasar a recoger la suciedad que dejan estas personas a altas horas de la madrugada. Con camiones cisterna que superan los 3.000 kilos permitidos para pasar por el casco urbano de La Laguna, el ruido del agua a presión para baldear las calles despierta a los vecinos a las 6.00 de la mañana de forma habitual.

Músicos callejeros

Por otra parte, la asociación denuncia que los músicos callejeros no están cumpliendo con la normativa acordada entre su colectivo, los vecinos y el ayuntamiento, que establecía condiciones como puntos concretos donde se podía tocar música, la prohibición de usar altavoces, un límite de tiempo de 45 minutos o un horario consensuado. Añade, además, que la Policía Local de La Laguna no multa a los infractores cuando los vecinos llaman por molestias.

"Es muy complicado concentrarse en determinadas tareas cuando tienes a un músico más de dos horas tocando el saxofón debajo de tu casa", explican desde la asociación a Atlántico Hoy.

Avances en los últimos años

Los vecinos dicen que comprenden que la Policía Local ha tenido problemas con el número de efectivos y también destacan que el problema con el ruido viene desde hace mucho tiempo y que se han conseguido significativos avances con el Grupo de Gobierno actual que preside Luis Yeray Gutiérrez, pero piden "un uso racional de los espacios públicos, ya que, aunque las actividades generan economía, exigen que haya coordinación y control del sonido".

Y destacan especialmente su petición al consistorio para que dé ejemplo y cumpla con la normativa. Los vecinos argumentan que el ayuntamiento programa muchas actividades y hay fechas en las que cada fin de semana hay algún evento en el centro lagunero, ya sea un concierto, una carrera o un escenario.

El Diputado del Común, por su parte, se ha comprometido a contactar con el Ayuntamiento de La Laguna para conocer si se está cumpliendo con la ordenanza municipal. “Este tipo de quejas son comunes en la Diputación del Común, ya que es un problema compaginar el derecho al ocio con el derecho al descanso”, ha destacado.

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