La oposición a Policía Local de La Laguna afronta el desenlace de su proceso selectivo. A falta de conocer la oficialidad de las notas, tan solo quedará le examen médico de los opositores que consiguieron las 41 plazas para comenzar con su formación.
Sin embargo, como ha ido publicando Atlántico Hoy, las irregularidades siguen marcando el devenir de todo el proceso, con la mencionada prueba de idiomas –voluntaria- como último epicentro de la controversia y transparencia de la oposición.
Proceso "chapucero"
Tras las graves denuncias de varios opositores y tras el silencio de las autoridades locales para explicar la situación, Atlántico Hoy ha tomado el pulso a los sindicatos que rodean el gremio, que también han estado manteniendo las distancias mientras se desataban las protestas y los contenciosos.
“Todo el proceso selectivo ha sido chapucero”, expone Domingo Chávez, representante del STAP-Canarias, con 27 años –y contando- de servicio como agente de la policía municipal lagunera y uno de los más veteranos en activo de toda la isla, si no el que más.
Idiomas, solo para los aprobados
Así, recuerda que se produjo “un incidente desagradable” con la prueba de lo idiomas para ampliar notas debido a la reinclusión de opositores a este punto del proceso. “Esta prueba siempre había sido para los que han aprobado y como hay una relación de puestos, servía para escalar. Para que los aprobados tuvieran la opción de superarse y tener una mejor posición”, señala.
Sin embargo, la prueba de idiomas ya se incluye desde hace más de una década como valor añadido a la nota final de todos los opositores, convirtiéndose en la última del proceso selectivo que otorga puntos a los candidatos.
“Ha habido una interpretación sesgada, injusta y anómala de las bases y ha generado un perjuicio a unos y un privilegio a otros”, detalla Domingo.
CSIF
Por su parte, Goyo, representante del CSIF, ha compartido que no observaron “grandes irregularidades” durante todo el proceso, pero sobre el hecho de que hay un grupo de opositores que no seleccionaron idiomas en la presentación de la instancia y fueron readmitidos en contra de las bases, matiza que “hubo un documento que no se aportó por parte del ayuntamiento”.
Es decir, Goyo apunta al “error” del consistorio por no incluir el documento de solicitud de la prueba de idiomas en la primera instancia como germen de toda la problemática, que ha terminado de saltar por los aires.
Acomodados
En este sentido, critica al sistema, ya que “muchos opositores están acostumbrados a que les den todo hecho”. Al fin y al cabo, el proceso siempre es el mismo sea la oposición en el municipio que sea, así como la forma de presentar la instancia.
“Lo que sucede es que como actuamos de manera tan mecánica, o no te dan el papelito para que pongas que quieres el inglés o lo tienes en cuenta. Hay gente más analítica que leyó las bases y sabía qué hacía falta ese papel. Nosotros solventamos esa situación a los opositores”, señala Goyo, que también dirige una academia de opositores.
Decisión correcta
Para tratar de evitar “posibles disgustos posteriores”, el representante del CSIF cree que el ayuntamiento “tomo la decisión más correcta” de examinar a todo el mundo, “porque cuando se quiera tomar la decisión de si se va a tener en cuenta la puntuación final de la prueba de inglés ya por los menos los has examinado. Si hubiesen excluido a alguien y el juez manda a que se examine a esas personas que no tuvieron opción a hacerlo, tendrías que retrotraer las actuaciones”.
El problema es que “hay candidatos que se quedaron fuera de plaza en detrimento de otros que no lo habrían presentado y reclamarán”. Concretamente siete, como averiguó Atlántico Hoy, a falta de confirmarlo las notas oficiales del Tribunal.
Por otro lado, Goyo contempla que “habrá personas aprobadas en plaza y, cuando se ponga cualquier tipo de recursos, se puedan quedar fuera e intentaran luchar por no perder esas plazas. Nuestra idea será defender la máxima legalidad y proteger a todo el mundo”.
ASIPAL
Adal, representante del sindicato ASIPAL, indica que Recursos Humanos “publica un modelo normalizado de instancia que te sirve para presentarte a policía, a jardinero, a arquitecto del ayuntamiento… Sirve para todo y como no todas las oposiciones tienen prueba de idiomas, pues no ponen en la web el documento para que selecciones el dicha prueba y los opositores no hacen nada”, argumenta.
Otra de las irregularidades que más destaca el representante sindical, de las varias que hubo en la prueba de idiomas, fue la inclusión en las instrucciones de una prueba de diálogo, speaking, que sería valorada por el Tribunal, algo que no especificaban las bases. “Recurrimos y acaban sacando una nueva prueba eliminando el speaking”, comenta Adal.
Anomalía en la firma
Respecto a la readmisión de 22 alumnos para hacer la prueba de idiomas, el documento informativo que las confirmaba fue firmado, por sorpresa, por la concejal delegada de Mercados y Presidencia, Carla Cabrera Teixeira, y no por la presidenta de Tribunal, Antonia Barrios Marichal. “No es normal”, apunta Adal.
“En un proceso selectivo el órgano competente es el Tribunal y, como, tal la presidenta es quien tiene que firmar. Normal no es, no sé si ilegal”, esgrime.
El problema del Tribunal
Sobre este tema, Domingo –STAP Canarias- cree que el Tribunal tiene un problema ahora mismo. “Cuando lo resuelva, le derivará la bola a la alcaldía, que tendrá que aceptar el proceso. Si lo acepta está siendo cómplice o consistiendo las posibles anomalías y si lo rechaza lo tiene que devolver al Tribunal para que lo resuelvan”, expone.
Domingo explica que esta irregularidad en la firma del comunicado de readmisión se debe “primero a la ignorancia y luego al compromiso”. Así, reflexiona que “a veces las lealtades provocan que tengas que saltar de un puente sin paracaídas. En este caso saltó y la concejal se olvidó el paracaídas. Si te prestas a eso, te prestas a todas las consecuencias”.
El desconocimiento no exime el cumplimiento
Por ello, “si efectivamente ella aceptó a la irregularidad del procedimiento y aceptó la admisión arbitraria y de manera irregular de esos alumnos por el compromiso al que se vio sometida, no solo tendrán que retrotraer todo, sino que quedará en evidencia. No vale el desconocimiento del derecho no exime de su cumplimiento”.
Sobre el resto de irregularidades denunciadas por varios opositores y publicadas por Atlántico Hoy, como cambios de notas elevadas tras audiencias en el teórico o notas extrañamente altas en el supuesto práctico, Adal expresa que a una persona “le puede parecer extraño que haya notas altas, pero nosotros no podemos poner en duda los criterios de corrección del Tribunal.
Anomalías no irregulares
Así, reflexiona si “¿es raro que haya demasiadas notas altas? Podría ser, pero, ¿por qué no? Dentro de las cosas que suelan ser normales puede haber anormalidades que para nosotros no son irregularidades”.
Asimismo, respecto a las reclamaciones y notas finales en el teórico en el que había un caso de un alumno al que se le subió demasiado, Adal aclara que fue porque se habían extraviado unos folios de su examen. “¿Quién dice que no? No ponemos duda esas cosas porque entendemos que dentro del Tribunal son funcionarios públicos y que esas personas actúan correctamente”.
Inacción del sindicato
En relación a las denuncias de no aceptar reclamaciones ni audiencias tras el supuesto práctico, el portavoz de ASIPAL defiende que el Tribunal “no ha actuado de manera irregular porque hay una cosa que se llama silencio administrativo, que es totalmente licito”.
En este sentido, señala que el siguiente paso natural del candidato sería un recurso de alzada, que es lo que ha ocurrido. “La ley prevé este tipo de silencios dentro de este procedimiento. Por eso, los sindicatos no podemos reclamar que se le responda a un opositor porque no se está actuando de manera irregular”, sentencia.