El Ayuntamiento de La Laguna ha informado este jueves de la ratificación judicial de la orden de la Gerencia de Urbanismo de clausurar la actividad de Tricampa Servicios de Automoción instalada sobre una parcela situada en San Bartolomé de Geneto.
En un comunicado, La Gerencia de Urbanismo de La Laguna detalla que Tricampa ocupa una parcela que en la década de los 90 y durante los primeros años del nuevo siglo se utilizó como depósito de vehículos hasta 2011, cuando cesó casi por completo su actividad, según muestran las imágenes aéreas captadas por Grafcan.
Pausa entre 2011 y 2016
Entre 2011 y 2016, año en el que fue adquirida por los nuevos propietarios, solo se aprecia un uso residual de la parcela, ocupada puntualmente por algunos vehículos.
Pero a partir de entonces se reactiva la antigua actividad de campa, que se complementa con un servicio de limpieza y taller de mantenimiento, para lo que amplía la superficie de uso mediante la realización de diversas actuaciones urbanísticas, detalla la corporación lagunera en la nota.
Sin licencia municipal
Los distintos expedientes abiertos contra Tricampa por parte de la Gerencia de Urbanismo revelan que ni las obras ejecutadas ni la actividad desarrollada cuentan con licencia municipal.
Si bien trataba de contar con título de actividad mediante la presentación de sucesivas comunicaciones previas, todos estos títulos decaían en su eficacia, pues no contaban con un requisito previo fundamental según la Ley de Actividades Clasificadas de Canarias y la Ley del Suelo de Canarias: la compatibilidad de uso urbanístico.
Invasión de suelo
Este hecho llevó a la Gerencia de Urbanismo a poner en marcha diversos procedimientos para restablecer el orden perturbado e intentar frenar una actividad clandestina que invade más de 100.000 metros cuadrados de suelo.
Además, Urbanismo hace hincapié en que "la actividad clandestina estaba sirviendo de aliciente a otras empresas de idéntica actividad que pretendían instalarse en suelos no aptos para este uso urbanístico".
Instrucción inédita
El edil de Ordenación del Territorio y director de la Gerencia de Urbanismo, Santiago Pérez, subraya que ésta es "una instrucción inédita, muy detallada, que marca las prioridades en esta materia".
Abunda en su importancia porque "además de tener un efecto pedagógico, refuerza la autoridad moral de la administración: no puede ocurrir que la gran infracción urbanística acabe impune, prescribiendo. La experiencia nos enseña, asimismo, que el gran infractor está muy bien asesorado jurídicamente", asegura.